La línea de tren de Caspe ha sido escenario de arrollamientos de coches que cruzaban pasos a nivel y de colisiones y descarrilamientos de convoyes.

Una persona moría el el 4 de noviembre de 2002 al descarrilar un electrotren tras chocar con un camión en La Cartuja, en un accidente en el que 36 pasajeros sufrieron heridas graves y los dos ocupantes del convoy resultaban lesionados de gravedad. El pasado 15 de abril, un soldado de Jaca fallecía y otros cuatro militares resultaban heridos al arrollar un tren de mercancías el vehículo en el que viajaban.

La vía ha quedado cortada tres veces este año por el incendio de un tren en Ascó (Tarragona), la colisión de dos convoyes en Caspe y la avería de un transporte de mercancías peligrosas en Fabara.