Entre el bonapartismo de Bono y la insolbencia de Solbes, el Gobierno del PSOE no ha parado de zigzaguear". El coordinador general de Izquierda Unida, Gaspar Llamazares, abrió ayer en Zaragoza la campaña electoral de la formación política de las europeas con duros ataques hacia la actuación del PSOE desde que está en el Gobierno.

Llamazares protagonizó ante unas 300 personas una acto electoral en el Auditorio de Zaragoza junto al cabeza de lista de IU al Parlamento Europeo, Willy Meyer, al aragonés Miguel Angel Gracia, y el coordinador de la coalición en Aragón, Adolfo Barrena. Horas antes, participó en una rueda de prensa en el Club Náutico de Zaragoza, en donde denunció que el "principal adversario" del PSOE no es el PP, sino los "ayatolás, imanes y guardianes de la ortodoxia neoliberal" de sus propias filas. Llamazares dirigió sus críticas hacia el ministro de Defensa, José Bono, y el vicepresidente económico, Pedro Solbes.

Y se mostró especialmente crítico con la posibilidad de que el Ejecutivo decida reformar la negociación colectiva o no acepte desclasificar los documentos reservados para la comisión de investigación del 11-M en el Congreso. Así, consideró que Solbes y Bono ponen "zancadillas" constantes a la gestión de José Luis Rodríguez Zapatero. El líder de IU reconoció también estar muy "dolido" por la negativa de Zapatero a firmar una declaración de condena contra el Gobierno de Estados Unidos por las torturas cometidas contra presos iraquíes, decisión que "no entendemos" y por la que preguntará al presidente del Ejecutivo en la próxima sesión de control en el Congreso, anunció.

Willy Meyer se mostró crítico igualmente con el PSOE y apuntó que su candidato, Josep Borrell se contradice cuando ofrece "grandes titulares" de contenido social en su programa, mientras que "cuando formó parte de la convención que redactó el borrador de Constitución Europea no apostó por una política económica que permita una UE más social". "No queremos que el PSOE dé titulares y que luego dé recetas de neoliberalismo", afirmó Meyer, quien aseguró que IU apostará por un cambio de la política económica dirigido a lograr el pleno empleo de calidad y a garantizar los servicios sociales a quienes no lo tengan.

FONDOS EUROPEOS Gracia subrayó por su parte la importancia de votar a IU en las elecciones porque "el modelo de Europa que queremos es también favorable a Aragón", ya que defiende el mantenimiento de los fondos que benefician a esta comunidad y apuesta por un modelo medioambiental que racionalice el uso del agua.

Mientras tanto, Barrena reclamó la "participación activa y militante" para conseguir la recuperación de la coalición en las elecciones al Parlamento europeo y advirtió: "No son un referéndum" de las del pasado 14 de marzo. El líder aragonés rechazó que estas elecciones sean la "reválida" de las del 14 de marzo, pero consideró que "son fundamentales" por el momento político en que se han convocado. Advirtió que otras coaliciones en las que "se chuntan" --en referencia a Chunta Aragonesista-- partidos nacionalistas de Euskadi, Cataluña, La Rioja, Aragón, Andalucía o Valencia "no dicen que pidiendo el voto serán el País Vasco y Cataluña los que estarán gritando en Bruselas". Lamentó que en la campaña "ni nacionalistas, ni partidos de derechas ni de izquierdas" hablen de la Constitución europea.