Tras la intensa granizada que tuvo lugar el jueves durante unos 15 minutos en Brea de Aragón, la mayoría de la producción industrial de la localidad ha quedado paralizada. La lluvia comenzó a entrar a borbotones por las alcantarillas, tuberías y por los tejados, los lucenarios cedieron ante la presión del agua y el granizo cayó sobre toda la producción que se encontraba en el interior. "Se mojaron las máquinas, los zapatos, las pieles trabajadas y todo el material", explicó Miguel Ángel Garcés, presidente de la Comarca del Aranda. "Todavía no ha sido posible cuantificar los daños, la gente está sacando agua, limpiando y esperando a los peritos para ver qué pueden hacer, pero no pueden trabajar", afirmó.

LARGO BALANCE El alcalde de Brea, Raúl García, ha pedido que la localidad fuera declarada como zona catastrófica ya que el 95% de los tejados de las fábricas sufrieron desperfectos. García también insiste en que el balance que habrá que hacer durante la semana "será largo tanto para fabricantes como para la gente del campo", quienes también han visto algunas zonas afectadas por completo. "Las tomateras, por ejemplo, son palos, el granizo no ha dejado nada", dijo. La Unión de Pequeños Agricultores (UPA) cifró en 13.000 las hectáreas afectadas en Aragón por el granizo, concretamente en Teruel, Calatayud y Somontano. Los cultivos más afectados son los de cereal, viñedo, frutales y los frutos secos, con un grado de daños "alto".

En cuanto a los fabricantes, Eduardo Barriga, gerente de Calzados Barrys, reconoció que se encuentran en una situación difícil. "No podemos servir pedidos, la mitad se ha mojado, tenemos un par de meses de trabajo perdido". Las fábricas, que se encuentran en plena temporada de fabricación de zapatos, han sufrido un gran golpe que repercutirá directamente en la economía local. Desde la Carpintería Tejero, también en Brea, Victor Barcelona, también han sufrido los efectos del granizo. "Hacemos moldes de cocina y teníamos varios pedidos terminados, ahora tenemos que volver a hacerlos y no llegaremos a tiempo. También hemos buscado soluciones provisionales para colocar una uralita en el techo por si vuelve a llover".

MEJORAN EL RESTO DE ZONAS En Illueca, donde también sufrieron los efectos del temporal, los desperfectos han sido de menor volumen debido a que el granizo que descargó en la localidad fue de menor grosor y los desagües consiguieron filtrarlo. El presidente de la comarca aseguró que solo dos empresas han sido muy afectadas por las lluvias. Por su parte, Calatayud está recobrando la normalidad poco a poco después de la intensa tromba de agua del jueves. Teruel también sigue recuperándose. Las tormentas, que asolaron especialmente la zona de La Puebla de Valverde de Valbona, dejaron grandes daños en caminos y masías, quedando algunas incomunicadas.