Zaragoza es uno de los principales destinos nacionales del turismo de congresos y ferias. Su situación geoestratégica hace que sea una plaza muy preciada de este mercado, que se ha venido abajo por culpa de la pandemia. Al margen de la profunda crisis actual del sector, preocupa cuál será el futuro del modelo de eventos y convenciones en la era post-covid dado el importante negocio que está en juego para la economía local. ¿La ciudad perderá visitantes y congresistas en detrimento de los actos virtuales?

La respuesta categórica de las instituciones locales encargadas de la organización y gestión de este tipo de actividades es que no. Más bien al contrario, dado que el sentir general de la ciudadanía es de volver hacer aquello que no han podido en estos tiempos de pandemia. «Las expectativas de poder tener eventos presenciales no se han perdido. El modelo no está en cuestión. Otra cosa es que se han acelerando cuestiones que ya estaban en marcha», sostiene el director general de Feria de Zaragoza, Rogelio Cuairán. La participación presencial, sentencia, «volverá con la misma intensidad de antes cuando todo esto pase», sentencia.

Ganas de ferias

Esta visión está apoyada en las conversaciones que la institución ferial viene manteniendo con el mundo empresarial. «La conclusión general es que hay ganas de ferias, que se quieren retomar cuando se pueda», afirma. «A la gente sigue gustando ver. Hay cosas que por la vía online no se pueden apreciar. Y luego está el factor personal», remarca. Estos aspectos son más remarcados en las muestras del sector agroalimentario, que son en las que está especializada Feria de Zaragoza, con la cita de FIMA a la cabeza.

Cuairán, sin embargo, sí cree que la pandemia ha acelerado algunos procesos de cambio que se venían gestando en todo lo que tiene que ver con lo digital. «Las actividades online que hemos venido lanzado se seguirán haciendo cuando se recupere la normalidad. Esto nos abre la puerta para llegar a más visitantes que por razones de coste o distancia no venían y ahora pueden seguirnos virtualmente. Lo vemos más como una oportunidad», concluye.

Para afrontar este reto, en los últimos meses se ha implementado la herramienta Feria Zaragoza Digital, un proyecto que dio sus primeros pasos en el 2019 y cuyo objetivo es ofrecer una plataforma 360º en la que lo virtual conviva y aporte sinergias a la parte presencial.

El director del Zaragoza Convention Bureau, Miguel Ángel Argente, también se muestra optimista y descarta que se vaya a recortar la participación presencial en el turismo de congresos en el futuro. «Estamos absolutamente convenidos de que el día que haya una inmunidad importante, vamos a tener eventos presenciales de todas todas», asevera.

Aunque considera que los eventos híbridos (presencial y virtual) «han venido para quedarse», no cree que esto tengo porque suponer una merma de visitantes. «Un congreso va más allá de una transmisión de conocimientos. Supone también el contacto con los colegas de profesión, salir del ámbito de trabajo o hacer contactos (networking)», explica. «Hacer algo por Zoom es frío. Las personas necesitamos tocarnos visualmente, compartir», argumenta.