Sergio Bretos tiene dos tiendas de ropa de mujer en el barrio de las Delicias. De la noche a la mañana, sus ingresos han caído a cero y tras la obligación de cerrar por el estado de alarma ha tenido que aplicar un ERTE a sus dos trabajadoras. «Las medidas anunciadas no van a ser suficientes porque muchos recibos y todos nuestros gastos fijos los vamos a tener que pagar igual; eso va a generar unas tensiones de liquidez muy grandes entre los comerciantes como yo», explica Bretos.

En este sentido, explica por ejemplo que la cuota de autónomos de marzo le llegará igualmente en unos días, aunque el Gobierno prevé abonarlas después en casos como el de Bretos. «También tenemos que seguir pagando el alquiler o las cotizaciones de la Seguridad Social de febrero, que llegan a mes vencido; demasiados gastos teniendo en cuenta que nuestras ventas han caído a cero», lamenta.

Su situación aún es más sangrante teniendo en cuenta que acababa de realizar una fuerte inversión para comprar las colecciones de primavera-verano. Por todo ello, el propietario de las tiendas Breylo reclama comprensión y más apoyo a la administración pública.