No es oro todo lo que reluce, ni lo son las nuevas tecnologías. Frente a sus ventajas, muchos profesores que corrigen exámenes de Bachillerato y de selectividad detectan sus incovenientes. En los últimos años, los docentes han percibido que la riqueza verbal de los alumnos ha disminuido, sus faltas de ortografía sonmás abundantes y su expresión menos fluida. Las "generaciones de los teclados" han llegado.

José Estarán es profesor de Historia en un instituto de Zaragoza y el creador de esta expresión para referirse a los adolescentes de ahora. Ha corregido exámenes de selectividad durante ocho años. "Actualmente, no se lee con tranquilidad y se escribe menos. Es la contrapartida de inclinarse por un método que da tanta importancia a los medios informáticos", explica.

Durante los últimos años ha percibido un "notable" descenso en el vocabulario que emplean los alumnos y en la claridad de su expresión. "Sus escritos se limitan a lo que han memorizado, no contextualizan y les falta soltura. Sin embargo, siempre hay excepciones", asegura.

En cuanto a las faltas de ortografía en selectividad, Estarán no ve la situación tan preocupante como otros docentes. Cree que se está progresando y que por eso los errores que se encuentran son más llamativos. En Bachillerato les advierten de la importancia de cuidar la expresión durante la selectividad, ya que se juegan puntos.

Blanca Jiménez es una de las profesoras que hace estas advertencias. Es profesora de Filosofía desde hace 34 años y trata a diario con alumnos de Bachillerato. Conoce la influencia del nuevo lenguaje de los móviles. "Durante el curso, he tenido a una alumna que en los exámenes escribía siempre q en vez de la conjunción que completa. A la vez que le advertía, le restaba puntuación. Al final he conseguido que lo escriba bien", comenta. Los estudiantes deben saber que en selectividad, además de los contenidos, se valora la madurez expresiva y la presentación.

Para esta docente, una de las causas del empobrecimiento verbal lo genera la falta de lectura y el ambiente social. Los alumnos leen, porque se les obliga, explica, pero muchos no hacen lectura comprensiva. "La sociedad es permisiva y da la sensación de que esforzarse no importa", dice.

Jiménez corrigió exámenes de acceso a la universidad a principios de los años 90 y desde entonces nota una diferencia abismal. Sin embargo, hay un fenómeno que ya se producía entnces y en el que coincide con otros docentes como José Estarán: la enorme diferencia entre unos centros y otros. Se nota mucho a quién le han engordado la nota y quien ha pasado por los pelos.

LAS PALABRAS EN LA PANTALLA Más del 90% de los alumnos presentados aprueba cada año la selectividad. Llegan a la universidad con sus progresos pero también con sus carencias, que deberán solventar durante sus años de carrera. José Enrique Laplana es docente de Lengua y Literatura en la Universidad de Zaragoza y ha corregido por primera vez pruebas de selectividad. Ha apreciado limitaciones "muy grandes" de vocabulario y expresión, así como una influencia de los medios de comunicación. Según Laplana, los estudiantes utilizan muchos clichés y muletillas de la televisión, así como el catalanismo "han habido". "Cometen faltas de ortografía y hay ausencia de acentuado y puntuación. En mi caso no he notado influencia del lenguaje de los móviles pero muchos sustituyen la televisión por la lectura, no están acostumbrados a ver las palabras escritas. No se les puede echar toda la culpa a ellos, son el reflejo de la sociedad", explica.

Mã Carmen Marín es profesora de FilologíaEspañola en la Universidadde Zaragoza. Este año ha sido secretariadel Tribunal de Economía yEmpresariales y asegura que el problemade los futuros universitariosestá en que leen muy poco. «Tienenmuy poco vocabulario y están muypoco acostumbrados a redactar»,asegura. Por su tribunal han pasado519 exámenes, con notas medias entreel 6,5 y el 7.

Ana Alonso ha presidido otro delos tribunales. Según la impresiónque ha recibido de sus compañeros,no ha habido excesivas notas brillantesy hay varios profesores que noestán muy contentos con el contenidoy el desarrollo de las pruebas. El93% de los alumnos que le correspondíanha aprobado, sin embargo,la nota media no supera el 6,5.