Una imagen vale más que mil palabras, pero si al elemento gráfico se une un millar de palabras, el resultado es todavía mejor. Así lo creen desde el Gran Archivo Zaragoza Antigua (GAZA), cuyos promotores José María Ballestín y Antonio Tausiet, son los autores de Los sombríos años 40, la nueva edición de la colección Memoria visual de Zaragoza, de EL PERIÓDICO DE ARAGÓN.

Esta pequeña enciclopedia gráfica de la ciudad de Zaragoza del siglo XX recoge en esta ocasión las imágenes de la capital aragonesa tras la guerra civil, en una década muy complicada por el contexto histórico, social y político de la época. «Era una Zaragoza sombría, tal y como hemos titulado el libro, porque seguía habiendo represión, la imposición de un nuevo régimen y además coincidía con una enorme crisis económica. Algunas fábricas y empresas se quedaron sin materiales y en algunas de las fotos hacemos referencia a ello; e incluso importantes empresas se quedaron paralizadas por la coyuntura económica”, explicó Ballestín.

La sala Pilar Sinués del Paraninfo fue el escenario de la presentación de la obra, cuyos autores estuvieron acompañados por numeroso público y el director de EL PERIÓDICO, Nicolás Espada, quien aseguró que esta nueva edición se suma a las anteriores y exitosas entregas. «Los lanzamientos previos han tenido una buena acogida», comentó. Los libro de los años 50 y 60 venden su tercera edición, los números de la obra de los años 70 están agotados y el de los 80 está cerca de este récord».

A través de casi 300 imágenes, algunas a color, y sus respectivas descripciones, que el lector podrá adquirir por 15 euros, se hace un recorrido por diferentes zonas de la ciudad, su economía y red de transporte y la sociedad del momento. «Intentamos mostrar partes de la ciudad que ya no existen, pero también las que sí, como es la Plaza de Aragón en portada», añadió Antonio Tausiet. «Creemos que la imagen con el contexto literario puede ser interesante para toda la gente que la conoce y también para la que no», aseguró Ballestín.

Los autores coincidieron con Espada en sumar esfuerzos para seguir construyendo esta enciclopedia de la Zaragoza del pasado centenario y compartieron su deseo de completar la serie con la edición de los años 90.