Los loteros aragoneses esperan que este año, por fin, la venta de lotería retome el vuelo tras seis años de caídas. Muestra de ello son los 116.400.800 euros que han pedido en consigna, más de 20 millones por encima de la venta el año pasado, que alcanzó los 93.751.060 euros. Según asegura Pedro Catalán, presidente de la Asociación de loteros de Zaragoza, pese a que "todavía es un poco pronto para saberlo, ya que mucha de la lotería son reservas", se espera una "buena campaña", con subidas en las ventas que, por el momento "van bien".

La media de lotería consignada por cada aragonés se sitúa en 86,41 euros, cuando en España es un 40% menor, de 61,56 euros consignados por habitante. También en cuanto a ventas, la comunidad aragonesa se sitúa sobre la media nacional. Es decir, que nos gusta más jugar que al conjunto del territorio español y los datos lo avalan: el año pasado el gasto medio por cada aragonés fue de 69,47 euros, un 39% más que la media nacional, situada en 49,98 euros.

Llama la atención el caso de la provincia de Huesca, que en 2013, con un incremento de un 1,33% fue la provincia peninsular con mayor incremento en ventas respecto al sorteo anterior, y una de las pocas en la que subió la demanda de boletos en España. Pedro Catalán atribuye este fenómeno al efecto llamada de los años anteriores, en los que el Gordo tocó en Huesca capital en el 2011 y en el municipio de Grañén en el 2012. Eso anima al resto de los ciudadanos a que se decidan a comprar sus boletos allí. El gasto por habitante en lotería en la provincia fue de 93,74 euros, un 35% superior a la media de Aragón y un 88% mayor que la de España.

Desde que el sorteo se puso en marcha en el año 1812, han sido 19 las veces que el gordo ha caído en Aragón: 12 veces en la provincia de Zaragoza --Calatayud ha resultado afortunada en varias ocasiones--, 3 en la de Teruel y 3 en la de Huesca.