NACIMIENTO EN ZARAGOZA, HACE 61 AÑOS. TRAYECTORIA FUE DIRECTOR DE LA GUARDIA CIVIL SIETE AÑOS. ESTA PRESO EN BRIEVA DONDE CUMPLE UNA CONDENA DE 31 AÑOS POR DELITOS FISCALES, MALVERSACION, FALSEDAD Y COHECHO. ESTA EN ZARAGOZA DISFRUTANDO DE UN PERMISO DE SEIS DIAS QUE ACABA EL DOMINGO.

--¿Ha leído la carta que ha enviado a un periódico el exsecretario de Estado de Seguridad Rafael Vera?

--No. Me han dicho que salía, pero aún no la he visto. (La ojea) Es cierto que hubo muchos que cobraron de esos fondos (reservados), incluidos algunos jueces. (Sigue leyendo y lanza una exclamación) ¡Ah, mira! dice que todo lo que hizo fue con conocimiento y autorización de sus superiores... Pero eso no lo dijo en el juicio... que me dejaron solo. Efectivamente dice muchas verdades, pero no solo sirven para él... también para mí.--Al margen de las consideraciones políticas, no ve algo raro en el tono...--(Vuelve a releer algunos párrafos y piensa) Parece la carta de un suicida... Después de llevar diez años en la cárcel, no siento alegría por que Rafael Vera y Rodríguez Colorado (exdirector de la Policía) puedan volver a entrar en prisión. Pese a que en mi última etapa al frente de la Guardia Civil tuve muchas discrepancias con Vera sobre cómo debía llevarse la lucha antiterrorista... El era partidario del diálogo con ETA, lo que Corcuera llamaba tomar la temperatura . Yo pensaba que eso era darles oxígeno... Esas ideas (se refiere al tono de la carta) todos las hemos tenido, yo también. Pero le pediría que sea fuerte (la voz pasa a ser casi tomblorosa), por su hija...

tomar la temperatura --¿Esas discrepancias les afectaron a la relación personal?--Sí. Nos hablábamos pero era una situación incómoda. Tanto que le pedí a Corcuera (entonces ministro del Interior) el relevo en varias ocasiones. Después, supe por José Luis (Corcuera) que Vera le había pedido mi cese. Cuando Rodríguez Colorado se fue de la Policía, yo insistí, pero al final aguantamos hasta que nos fuimos todos...

--¿Cree que fue un error, tal y cómo se había llevado la lucha antiterrorista, que Felipe González entregara el ministerio del Interior a exjueces como Juan Alberto Belloch o Margarita Robles?--No sé si contestar porque posiblemente no sea objetivo ... (silencio). El nombramiento de Belloch fue una sorpresa en el ministerio y para algunos desagradable. No voy a negar que yo era contrario. Me vino a la memoria cuando, siendo presidente de la Audiencia de Bilbao, ordenó una rueda de reconocimiento con guardias civiles y cómo Felipe González llegó a escribirles una carta recomendándoles que no fueran.

--¿Le ha sorprendido la carrera política de Belloch? Ahora es el alcalde de Zaragoza, se sienta en un sillón que usted también ocupó...--Es un alcalde elegido por los zaragozanos y ellos sabrán lo que han hecho. Ahora... ¡que Dios les conserve la vista! No obstante, como alcalde de mi ciudad le deseo lo mejor. Cuantas más cosas haga y más prospere Zaragoza mejor para todos. Le deseo suerte y acierto.

--Pese al asunto de Laos...--(Endurece el tono de voz) De lo que pasó allí ya hablaremos.

--¿Es una amenaza?--Estoy escribiendo un libro donde cuento muchas cosas. Que no se preocupen que nadie irá a la cárcel.

--Pues cuéntelo.--Mientras esté en prisión no puedo hablar. A lo mejor por eso interesa que siga estando ahí.

--Recientemente ha sido excarcelado por motivos de salud el exgeneral Enrique Rodríguez Galindo. Vive en Zaragoza ¿Le ha visto?--Es una persona a la que le tengo cariño y un gran respeto profesional. Ha sido clave en la lucha antiterrorista y sin embargo le han humillado, han hecho una lectura hipócrita de su labor... No le he llamado. En este viaje no voy a hacerlo porque se le daría demasiada notoriedad.

--Está escribiendo un diario en prisión ¿qué anota?--Aparte de reflejar cómo me encuentro, si mi hijo Diego saca buenas notas o si hace buen día también hago comentarios sobre la actualidad política o sobre acontecimientos.

--¿Ha escrito sobre el atentado del 11-M?--A las 12 del mediodía, mientras el Gobierno decía que era ETA yo ya había escrito diez consideraciones por las que creía que no era autora.

--Desgránelas.--Desde que tomo tantas pastillas voy perdiendo la memoria (Se excusa) pero recuerdo que oí a Otegi (portavoz de Sozialista Abertzaleak, antigua Batasuna) negando la autoría y ETA nunca ha mentido. Luego oí lo de las mochilas, que no hubo aviso, la sincronización con la que se hizo... Pero sobre todo pensé que un atentado así no lo hubieran aprobado sus bases y habría supuesto el fin de la banda.

--La opinión pública se pregunta por qué no ha devuelto el dinero.--El Estado me ha confiscado ya propiedades y dinero por valor de más de 900 millones de las antiguas pesetas, casi 200 estaban en Suiza. Hay bienes que siguen sin ejecutar y que están generando problemas a las comunidades, otros sobre los que el embargo ha prescrito y siguen sin subastar. Yo he sido el primer interesado.--La juez de Vigilancia Penitenciaria de Valladolid le ha concedido el régimen abierto. El fiscal lo ha recurrido.--Mi situación no la ha vivido ningún preso. De 22 permisos que he disfrutado, 20 han sido por resolución judicial. Llevo diez años en prisión y con tres cuartas partes de la condena cualquier preso estaría en la calle. Las sentencias, como dice Vera, deben ser justas, no ejemplarizantes. He cometido unos delitos que han sido penados y estoy cumpliendo. Pero el aislamiento es una pena adicional.

--La juez de Vigilancia Penitenciaria de Valladolid le ha concedido el régimen abierto. El fiscal lo ha recurrido.

--Usted no es un preso típico.--Lo sé, pero no tengo otra compañía que yo mismo.

--Tiene TV, libros, estudia...--Es cierto que ahora valoro las cosas más que antes. Todo lo veo con otra perspectiva. Me he acostumbrado a una vida austera: como de manera frugal y mal, y necesito poco. Con un libro, un buen disco y un bolígrafo de todo a cien para escribir (lo muestra) tengo bastante.

todo a cien --¿Ha encontrado ya trabajo?--Tengo varias ofertas y estoy en ello. Pero mis plazos en la vida son ahora cortos. Cuando llegue el momento lo decidiré.

--¿Es usted feliz?--Digamos que me sobrevivo, que ya es mucho.