POR ADRIANA OLIVEROSDicen que ya no compramos productos, sino experiencias. Pues Astún ha dado en el clavo con esta. Háganse a la idea: Acaba la jornada de esquí... En lugar de irse a cava, los llevan a una terraza en la cumbre para disfrutar de tapeo y benjamín Freixenet, de fuegos artificiales y de una bajada nocturna de antorchas. No contentos con eso, a la mañana siguiente les invitan a hacer la primera bajada con los pisters, con la estación aún cerrada. Todo junto es el pack experiencias Astún, que se vende combinado con cinco hoteles de la zona --Barceló, María Cristina, Oroel, Real y Europa-- y también suelto, por 40 euros.La idea necesitaba una presentación ad hoc. Y menuda organizaron. Fiesta el jueves en el hotel Barceló, presentada por el televisivo Mariano Navascués --que sabe mucho, Chino,chano--, a la que asistió un pequeño grupo de periodistas. Entre ellos, afortunadamente, el fotógrafo Gabi Orte (al chilindron.es), que envío fotos buenas, y el responsable de Gastronomía de este diario y de su genial iGastro, José Miguel Martínez Urtasun, que chivó toda esta información para la página lupera. Unos con la tecla y otros con el chín. No digo nada...Envidias aparte puedo contar más. Que la presentación fue un lujazo en buena compañía. Acudieron Jesús y Amado Santacruz, responsables de la estación de Astún, Vicente López Brea, su director de Comunicación, Pedro Bonet, directivo de Freixenet... Hasta los presentadores de Zarrios --David Maturén y Ricardo Ostalé-- aparecieron. Brindaron en la terraza de Ibones, comieron tapas del restaurante La Moleta. Disfrutaron del

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