Una idílica noche de luna llena acompañó al centenar de participantes de la primera marcha nocturna en defensa de la estepa en su viaje por el llamado Sendero de Goya . Un total de 42 kilómetros de lo que antiguamente era el camino tradicional que unía Zaragoza con Fuendetodos. Aunque el grupo partió de día, exactamente a las 20.30 horas del sábado desde el cementerio de Torrero, en ningún momento dejó de iluminarse el recorrido, lo que permitió el disfrute más intenso si cabe de este paisaje tan particular del sur de Zaragoza, amenazado por futuras infraestructuras y actuaciones urbanísticas.

Entre estrellas fugaces, algún que otro conejo, el sonido de grillos e insectos y la tenue presencia del vuelo de las aves, las explicaciones de los organizadores sobre el peligro de modificación del lugar dejaban sin embargo un sabor agridulce en el grupo de curiosos. "La estepa está conociendo un proceso destructivo sin precedentes. Calculamos que unas 4.000 hectáreas están siendo convertidas en la actualidad en suelo urbanizado o se están viendo afectadas por infraestructuras. Pero el futuro que se avecina es todavía peor", afirmaba un representante de los ecologistas.

Amenazas y soluciones

Se citó, entre otros, los proyectos de hasta 20.000 viviendas que estudia el ayuntamiento de La Muela, incluido un campo de golf, y la ampliación de otras urbanizaciones ubicadas junto al camino, el Parque Tecnológico de Reciclado que se construye junto a La Cartuja, Pla-Za, Puerto Venecia o la ecociudad de Valdespartera.

"Las estepas albergan especies endémicas únicas en Europa, por lo que la responsabilidad de su conservación es mucha. Por ello pedimos la declaración de un parque estepario en el sur de Zaragoza que salvaguarde la Red Natura 2000, implicando a los municipios afectados", se escuchó de la lectura del manifiesto leído junto al refugio de Valmadrid para la treintena de caminantes que finalizó la marcha. El resto, optó por la propuesta corta y la vuelta en coche.

"Curiosamente, este refugio de montaña es el primero que se levantó en Aragón para albergar a los montañeros. Allí subían desde Zaragoza con sus esquís de madera transportados por el tren de Utrillas, y esquiaban por las laderas de La Plana", explicaban.

Ansar, Ecologistas en Acción y varias asociaciones de vecinos de Torrero, Delicias, San José, La Cartuja y Torrecilla Valmadrid se sumaron al manifiesto y a la marcha, que finalizó sobre las siete de la madrugada del domingo. El éxito de la experiencia ha hecho que la organización se esté replanteando repetir esta marcha nocturna.