Ya no hay marcha atrás. la Harinera y el instituto Luis Buñuel estarán a punto para el próximo año. Mañana se aprobarán en el Consejo de Zaragoza Vivienda los pliegos de condiciones de los trabajos de rehabilitación de ambos inmuebles para darles un uso social a sus instalaciones. Ha costado tiempo y muchas peticiones de entidades vecinales y sociales pero, ya es una realidad. El Ayuntamiento de Zaragoza sacará a licitación pública las obras de acondicionamiento de ambos edificios en los próximos días.

Los gastos derivados de la contratación de obra se financiarán con las partidas presupuestarias del 2013 destinadas a Zaragoza Vivienda para la revitalización social y comercial de espacios vacíos, dotada con 410.000 euros y la del 2014, con 310.000 euros.

La reforma de adecuación parcial del antiguo consistorio zaragozano, ubicado en la plaza Santo Domingo del barrio de San Pablo, supondrá un coste de 344.690,35 euros (más IVA). Según las previsiones, los trabajos de obra en el Luis Buñuel no superarán los cuatro meses.

El Gobierno de Zaragoza encargó ya en febrero de este año a Zaragoza Vivienda la redacción de los trabajos de reparación del patio interior del edificio, para poder destinarlo a actividades de uso lúdico y deportivo, y de la planta baja en la que poder desarrollar actos sociales.

Fue la oficina del Plan Integral del Casco Histórico (PICH) la que promovió darle un uso a este inmueble en representación de las organizaciones vecinales y sociales del barrio.

El objetivo no es otro que lograr llenar de actividad una finca abandonada en beneficio del ciudadano para dinamizar el entorno de San Pablo. El mismo fin se persigue con la reforma de la antigua Harinera de San José.

Las obras de la fábrica están tasadas en 300.625,89 euros (más IVA) y su duración de tres meses. Los trabajos de acondicionamiento consistirán en la adecuación de la planta baja y el sótano de la antigua harinera.

Los pliegos llegan con retraso. Tanto que en enero del 2014 ya se barajaba febrero como fecha para acometer las obras de manera que, antes del inicio de verano, el edificio tendría que estar a punto. Finalmente, será para principios del 2015.

PROYECTO De forma paralela, Zaragoza Cultural ya presentó su propuesta de eventos para la Harinera.

La idea es que la rehabilitación se lleve a cabo con la colaboración directa de los vecinos de San José y convertir el proceso de acondicionamiento en una acción directa. Es decir, se invitaría a residentes y artistas a dotar el futuro centro cultural de contenido. No solo eso. El edificio de San José se convertirá en un espacio interdisciplinar para que los agentes culturales tengan la opción de tener espacios experimentales. Todos aquellos que disfruten de sus instalaciones tendrán que contribuir con el proyecto. Los talleres se cederán, pero a cambio de una contribución.