El Gobierno central sacó ayer adelante el paquete de medidas urgentes para paliar los daños por las lluvias caídas en Aragón la semana pasada. El texto, tal y como adelantó EL PERIODICO, incluye bonificaciones fiscales en las cuotas a la Seguridad Social y en el IRPF, ayudas excepcionales por daños personales, en viviendas, cosechas e infraestructuras, así como préstamos preferenciales. En general, los topes de las compensaciones aumentan con carácter excepcional y se suavizan las limitaciones para obtenerlas.

El decreto ley aprobado en el Consejo de Ministros engloba, no obstante, las inundaciones e incendios ocurridos en cinco comunidades autónomas --Andalucía, Comunidad Valenciana, Cataluña, Navarra y Aragón--, sin especificar el dinero concreto que recibirá cada una de ellas. A pesar de ello, se concreta que, por ejemplo, sólo para la reparación de infraestructuras municipales, la dotación presupuestaria asciende a quince millones de euros.

La valoración de los daños realizada por el Gobierno aragonés y la Confederación Hidrográfica del Ebro (CHE) asciende a 42 millones de euros, de los que 30 corresponden a infraestructuras hidráulicas, seis a agricultura y otros seis a infraestructuras públicas y privadas. Ayer, el Ejecutivo central consideró "que la magnitud de estos daños es equiparable a la de desastre natural en los términos de la UE sobre ayudas estatales al sector agrario".

LOS BENEFICIOS Entre los beneficios fiscales aprobados en Madrid se encuentran la exoneración al empresario de las cuotas a la Seguridad Social mientras dure la suspensión del trabajo y el pago de las indemnizaciones a los trabajadores en caso de extinción del contrato. También habrá una moratoria de un año en las cuotas a la Seguridad Social correspondiente a los tres meses naturales anteriores al siniestro, que hasta ahora era de dos meses. Como novedad se prevé la devolución de las exenciones que se hayan pagado.

Asimismo, aparece la liberación del Impuesto sobre Bienes Inmuebles (IBI) para las viviendas, locales y explotaciones agrarias dañadas; la reducción proporcional al tiempo de producción de la actividad en el Impuesto sobre Actividades Económicas (IAE); habilitación al Ministerio de Economía y Hacienda para que reduzca los módulos de las actividades agrarias, con la disminución de las cuotas en el IRPF, o la exención de tasas de Tráfico por tramitar bajas de vehículos.

También se contempla una ayuda de 18.000 euros (hasta ahora era de 12.000) para los familiares de las personas fallecidas, que en el caso de Aragón serían dos o cuatro si como tales se consideran los dos muertos en un accidente de tráfico ocasionado por la lluvia. Para los desperfectos en las viviendas se elevan las compensaciones de 9.000 a un máximo de 24.000, eliminándose el nivel de renta. Y se amplía la línea de crédito preferencial, dotada con 20 millones de euros.

En cuanto a las cosechas, se indemnizarán las pérdidas no cubiertas por las pólizas de seguros y se pagarán los cultivos que, por las fechas, no tengan todavía contratado el seguro correspondiente.