La Asociación de Familiares y Amigos de los Asesinados y Enterrados en Magallón (AFAAEM) celebra este fin de semana en esta localidad zaragozana las jornadas de memoria histórica bajo el título “Desenterrando el silencio”.

Este encuentro supone un homenaje a las 81 personas asesinadas y enterradas en el pueblo en agosto de 1936 y cuyos restos han podido ser identificados casi diez años después de que se empezaran los primeros trabajos en la fosa común a la que fueron arrojados que, en aquel momento, era la fosa común más grande de cuantas se habían recuperado cuerpos en todo el país.

Las jornadas se desarrollarán en Magallón los días 29 y 30 de septiembre. En ellas se inaugurará un memorial en el cementerio de la localidad. Además, a través de tres mesas de debate bajo los epígrafes “Verdad, Reparación y Justicia”, se tratará de desentrañar los dramáticos sucesos que en Magallón, como en todos los lugares del país, desencadenó el golpe de estado de 1936. Asimismo, se analizará el estado de las políticas de memoria histórica en la actualidad y se plantearán las necesidades democráticas de un país que no puede permitirse el lujo de no amparar a todas sus victimas y construirse sobre el olvido.

Entre los intervinientes, figuras tan destacadas como el Secretario General de UGT, José Álvarez, la Consejera del Gobierno de Aragón Mayte Pérez, el Director General de Memoria Histórica del Gobierno de España, Fernando Martínez, la Presidenta honorífica de AFAAEM, Olga Alcega, los periodistas Ramón Lobo y Rosa María Calaf, el ex fiscal del tribunal Supremo José Antonio Martín Pallín, el portavoz de Jueces para la democracia, Joaquín Bosch, el fundador de la Asociación para la Recuperación de la memoria histórica, Emilio Silva, Juan Calvo de Amical Mauthausen, y un largo etcétera de figuras de primer nivel político, judicial y técnico como el abogado Eduardo Ranz, artífice jurídico de la primera sentencia a favor de unos familiares de dos personas enterradas clandestinamente y sin permisos de las familias en Cuelgamuros, Antonio Quero, funcionario de la Comisión Europea, José Ángel Miramón, Diputado Provincial, Paloma Aguilar, Catedrática de Ciencias Políticas en la UNED y el doctor en medicina legal forense Paco Etxebarría, que dirigió la exhumación de Magallón, y los arqueólogos Berta Martínez y Iimi Jiménez.

Los trabajos de exhumación de la fosa de Magallón comenzaron recién aprobada la Ley de Memoria histórica, en 2008 y han concluido en 2018. En ellos se han recuperado e identificado gracias al ADN de los familiares que nunca dejaron de buscarlas, los restos de las 81 personas de 19 pueblos aragoneses y navarros que fueron asesinados y enterrados juntos en el mes de agosto de 1936.

AFAAEM, una vez terminados los trabajos de exhumación e identificación, continúa en activo buscando pistas y rastros de otras personas desaparecidas en varios pueblos de los alrededores y en el propio Magallón cuyo paradero definitivo es, todavía, un interrogante