Las tres clínicas privadas que se han quedado fuera del plan de choque quirúrgico puesto en marcha por la DGA para aliviar y reducir las listas de espera en Aragón no esconden su "malestar" tras saber que no estarán entre los centros seleccionados.

La clínica Montpellier, El Pilar y el centro médico Hernán Cortés aspiraban a recibir operaciones derivadas al sector privado y presentaron su predisposición. Sin embargo, la cuestión económica ha sido el motivo que ha dejado fuera a estos centros. "Comprendemos las circunstancias y la coyuntura actual, pero estamos analizando la situación en común para ver qué opciones tenemos", apuntaron ayer a este diario fuentes de las clínicas afectadas.

Por su parte, Sanidad reconoce que han negociado "según el precio" y, por eso mismo, han optado "por las baratas", matizaron. "Se presentaron unos paquetes y las clínicas optaron a ellos. Hemos sido transparentes desde el principio", añadieron fuentes del departamento. La DGA ha aplicado una rebaja del 20% respecto al 2013 en la tarifa de la concertación con los centros privados en esta nueva fase del plan de choque, que ya ha comenzado a derivar operaciones de cataratas, artroscopias de hombro y de rodilla, prótesis de cadera, menisco y ligamentos cruzados y laterales, entre otras.

El consejero Oliván garantizó la semana pasada que los datos acerca de las listas de espera en Aragón se publicarán antes de la celebración, a finales de mayo, de las elecciones europeas e indicó que existen dos razones que justifican que no se publiquen: por un lado, la incorporación de datos del plan de actividad quirúrgica vespertina y, por otro, la contratación de las propias clínicas privadas. De momento, la web del Salud continúa sin actualizar los datos de las listas de espera desde junio del año pasado.

MÁS DATOS Mientras, la demora quirúrgica continúa incrementándose. Así lo denunció ayer el sindicato médico CESM, que advirtió de que el aumento también alcanza al hospital San Jorge, de Huesca, donde habría hasta 33 peticiones radiológicas de pacientes ingresados, lo que supone la obligada prolongación de su estancia. Además, el colectivo indicó que las ecografías están siendo citadas después del verano y el retraso acumulado para un TAC supera los 4 meses y más de 200 pacientes llevan esperando más de medio año una de estas pruebas o una ecografía."También las mamografías solicitadas en noviembre se están haciendo ahora. Y eso que eran preferentes", subrayaron desde el sindicato.

El colectivo Marea Blanca denunció recientemente que más de 15.000 personas esperan una operación solo en Zaragoza. El 40% de ellos, unos 6.000, acumula más de seis meses aguardando una intervención.