El tabaco es nocivo hasta para los animales domésticos. Una colilla sobre un sofá provocó la pasada madrugada un incendio en el que el dueño de la vivienda resultó intoxicado y sus dos gatos murieron como consecuencia del humo.

Todo ocurrió a las 4.15 horas en el número 15 de la calle del Arzobispo Domenech de la capital aragonesa. Hasta el lugar se trasladaron varias dotaciones de los Bomberos de Zaragoza que se encontraron al inquilino a fuera del domicilio esperando en el rellano del edificio. Presentaba síntomas de intoxicación, por lo que este equipo de emergencias decidió trasladarle en ambulancia a un hospital.

Las tareas de extinción se prolongaron hasta aproximadamente las 5.30 horas, siendo necesaria la utilización de una bomba urbana ligera, una autoescala automática y una unidad de mando y comunicaciones.

Una vez apagadas las llamadas y tras realizar una revisión de la vivienda, los bomberos descubrieron que los dos gatos que tenía el propietario de dicha vivienda habían perdido la vida como consecuencia del humo que habían inhalado.

Las llamas se originaron en el salón del piso, concretamente en el sofá, por lo que fuentes del cuerpo apuntan a que el fuego podría haber sido provocado por un cigarrillo, según fuentes de bomberos, si bien la investigación recae en el Cuerpo Nacional de Policía.

Aunque la causa de la muerte de los felinos fue como consecuencia del incendio, los científicos afirman que el humo de los cigarrillos es tan peligroso para perros y gatos como lo es para los humanos.

«Los felinos que viven con personas fumadoras tienen el doble de posibilidades de padecer cáncer y tumores como el linfoma, que afecta a la sangre», explica la veterinaria Carolynn MacAllister, de la Universidad de Oklahoma, quien ha estudiado el peligro del humo de los cigarrillos para las mascotas. «Los hábitos de limpieza en felinos, el continuo acicalamiento, aún aumenta estos peligros», añaden estos expertos en un estudio de Eroski Consumer.