El pasado 24 de octubre, 28 asociaciones aragonesas y del sur de Francia que giran en torno a la recuperación de la memoria histórica suscribieron un manifiesto en el que urgían a las administraciones, tanto la central como la autonómica, a "mantener los programas y actuaciones" relacionados con la guerra civil. Los firmantes alegaban que la crisis no podía dar al traste con su esfuerzo.