La Asociación de inmigrantes senegaleses de Aragón, ante los números casos de violencia que sufren los manteros a nivel nacional, y en concreto en Zaragoza, realizaron ayer una cadena humana en contra de lo que califica como «racismo institucional». Este concepto hace referencia a las barreras que se encuentran las personas inmigrantes a causa de la Ley de Extranjería, como por ejemplo, los problemas relacionados con la documentación, explicaron.

También incluye los casos de violencia «a manos de la Policía Local» que, según explicó el presidente de esta organización, Ydrissa Gueye, «se han incrementado en los últimos meses», algo que desde los sindicatos policiales niegan. En Zaragoza hay unas 200 personas que venden productos en la calle.