Bajo la determinación de que no hay cuerpos equivocados, sino miradas represoras, la actriz chilena Manu Guevara presenta este martes en Zaragoza "El diablo es magnífico", una cinta en la que narra su historia como migrante trans en París.

Así lo ha explicado la protagonista en una rueda de prensa sobre este largometraje dirigido por el también chileno Nicolás Videla y que se presenta este martes 30 de abril a las 19:30 horas en el zaragozano Centro de Historias.

Será en el marco del festival Zinentiendo, muestra internacional de cine lésbico, gay, trans, bisexual, queer e intersex que se desarrolla durante abril y mayo con diferentes sedes en Zaragoza y con paradas también en Huesca, Jaca y Teruel.

En esta ocasión, la cinta de "El diablo es magnífico" no aborda solo la vida de una persona transgénero, ha explicado su protagonista y coguionista, sino que el papel más importante lo juegan "los límites y las fronteras".

"No hay solo un tema de género y sexo, sino un tema de espacio. Pasar la frontera de tu país y hacer tu vida, ir en búsqueda de ti misma en otro contexto cultural, político y social", ha relatado Guevara sobre esta historia que narra el paso de la protagonista por París.

Así, el filme reconstruye una biografía, un "híbrido entre documental y ficción", ya que, en palabras de Guevara, no es un documental, puesto que las escenas no ocurren por primera vez ante la cámara pero, sin embargo, tampoco es completamente ficción puesto que esas escenas tuvieron lugar.

"Lo que hicimos fue reconstituir las escenas de mi vida, como hace la policía en los crímenes", ha bromeado.

La protagonista ha incidido en que la película huye tanto del victimismo como del morbo, clichés sobre los que en su opinión se sustentan otras películas que abordan la misma temática.

"Ser transexual no es el drama de la película; es una realidad, y punto", ha matizado, puesto que en su cinta, lejos del victimismo, han buscado el "empoderamiento" y mostrar a la protagonista como "una heroína".

"Decidimos darle un vuelvo a toda esta situación de opresión con la figura del diablo. Por eso la película se llama 'El diablo es magnífico', porque cuando te asignan a lo oscuro, al margen, uno puede quedarse en esa oscuridad, pero también puede ser brillante y resplandeciente", ha detallado.

Y además del proceso de inmigración desde Chile a Francia, la actriz también ha destacado el "desplazamiento del sexo que te asignaron desde la infancia", algo que significa una "'performance' constante y que no se puede fijar".

Desde el Instituto Francés en Zaragoza, que colabora en la proyección de esta película, Laure Vázquez ha subrayado la importancia del ciclo para la visibilización y la normalización de la diversidad, así como el papel de la cultura como "espacio de luz frente al oscurantismo".