En un momento en el que se habla de regeneración política, el nuevo presidente del Tribunal Superior de Justicia de Aragón (TSJA), Manuel Bellido, apeló ayer a hacerlo también en la Administración de Justicia. Ante una amplia representación de magistrados de toda la comunidad con motivo del acto solemne de su toma de posesión, les solicitó que sean "independientes" y que cuenten con el contrapeso de la "responsabilidad, que evita que se conviertan en sujetos titulares de un poder sin control alguno".

Bellido, que juró su cargo ante la atenta mirada del presidente del Consejo General de Poder Judicial (CGPJ), Carlos Lesmes, se mostró preocupado por la falta de credibilidad de los ciudadanos en la Justicia, ya que según el Eurobarómetro de 2013, solo un 34% de los españoles tiene confianza en ella, frente al 53% de media en los países de la Unión Europea.

Por ello, pidió "no hacer oídos sordos" porque "es una muestra más de la desafección hacia todas las instituciones del Estado, lo que constituye un grave problema nacional". "La Justicia que demanda la sociedad democrática moderna exige garantizar la independencia y la responsabilidad de los jueces y procurar, en su vertiente de servicio público, ser eficaz en el logro de sus objetivos, en particular dando una pronta respuesta y una eficiente utilización de los recursos disponibles", apostilló.

TRANSPARENCIA

Para el nuevo presidente "no basta" con ser independiente y responsable, sino también hacerlo ver a los ciudadanos. Solicitó a magistrados, fiscales, secretarios y demás trabajadores de esta administración que "abran las puertas a la sociedad, facilitando la información que genera al conocimiento de los ciudadanos".

Manuel Bellido accede al TSJA después ser titular del Juzgado de lo Social número 5, circunstancia que se percibió a lo largo del discurso, ya que demostró saber cuáles son los principales problemas del día a día de todos los trabajadores del sector.

Aprovechó la presencia de la presidenta de Aragón y del consejero de Justicia, Luisa Fernanda Rudi y Roberto Bermúdez de Castro, respectivamente, para solicitar que se implante la Nueva Oficina Judicial como "paso imprescindible" para realizar posteriormente otras reformas.

También afirmó que se "debe seguir avanzando" en la aplicación de las nuevas tecnologías de la información hasta llegar al objetivo final del expediente digital único. "Si lo conseguimos, obtendremos una justicia de mayor calidad, transparente y eficiente, que nos permitirá ahorrar tiempo, trabajo y dinero".

No obstante, también valoró el "esfuerzo" de la DGA en la renovación de infraestructuras como la Ciudad de la Justicia de Zaragoza, el Palacio de Justicia de Huesca o la Audiencia Provincial de Zaragoza.