El exministro de Asuntos Exteriores del PP José Manuel García Margallo ha afirmado que "salirse del centro político" sería un "camino seguro" para que el Partido Popular perdiese las próximas elecciones generales y ha invitado a su formación a llevar a cabo una "refundación del centro-derecha" junto a Ciudadanos.

El diputado popular ha expresado a los medios, antes de su intervención en el Fórum Panasef de Zaragoza, que su ideal sería alcanzar una "nueva unión del centro democrático", en la que tendrían cabida ambos partidos, y que evitaría una división del electorado que favoreciese el triunfo de la izquierda en los próximos comicios.

"Estoy seguro que en esta, como en tantas otras ocasiones, seré una voz solitaria en el desierto", ha asumido García Margallo, quien ha vaticinado un gran acuerdo en Cataluña entre Partido Socialista, Podemos y Esquerra Republicana.

A preguntas de los periodistas, el exiministro ha defendido que la actuación del Gobierno catalán en el proceso soberanista debe ser calificada como un "golpe de Estado", a pesar de que no se haya producido un "alzamiento en armas", ya que supone un "intento de alterar el orden constitucional".

"Los separatistas catalanes deberían recordar que en el paradigmático golpe de Estado de Primo de Rivera en 1923 tampoco hubo violencia", ha añadido el diputado popular, quien ha criticado los "desprecios al Rey, el adoctrinamiento en las escuelas y los mensajes sectarios de los medios de comunicación pública" que a su juicio se han producido en la comunidad autónoma.

En cuanto al posicionamiento de España con respecto a la exportación de armamento a Arabia Saudí, el que fuera parlamentario europeo durante 17 años ha abogado por no tomar "decisiones unilaterales" y mantenerse en la "corriente" que marque la Unión Europea, a través del Consejo de Ministros de Asuntos Exteriores.

En ese sentido, Margallo ha recordado algunas de las inversiones que realiza España en el país de Oriente Medio en materia de infraestructuras como la instalación de la línea de alta velocidad que conecta La Meca con Medina o la adjudicación de varias líneas de metro en Riad.

"Hay que equilibrar el compromiso con los derechos humanos y las libertades con la defensa de los intereses y, en concreto, del empleo", ha expuesto el exministro de Asuntos Exteriores.