Un total de 4.330 personas se presentaron ayer en Zaragoza a las oposiciones de celador, para las que hay 259 plazas. Son un 43% menos que en la última convocatoria, cuando se inscribieron 14.774 personas, de las que solo se presentaron 7.571. En este examen había inscritos inicialmente 7.873 opositores, una cifra nada habitual teniendo en cuenta que esta prueba, junto a la de auxiliar administrativo, suele ser de las más numerosas de todas las que convoca el Salud.

El examen se prolongó durante dos horas y estaba compuesto por más de un centenar de preguntas tipo test que, en caso de responder erróneamente, restan puntuación.

El descenso en el número de participantes tiene que ver con que este año las plazas ofertadas eran menos que en el 2018, solo 259. Eso sin olvidar que en el pasado ejercicio se sumó un gran número de celadores que ya están integrados en el Salud y que llevaban años preparándose las oposiciones.

Las vacantes se distribuyen en 177 de turno libre, 25 para discapacitados, 2 para víctimas de terrorismo y 55 de promoción interna, aunque en este caso solo se han presentado 31.

LA PRUEBA

El examen no lo es todo, pues supone el 60% de la nota. El 40% restante responde a puntos acumulados que se suman con experiencia profesional previa y formación complementaria.

Como es habitual, entre los pasillos de los centros donde se desarrolló el examen había bastantes nervios. Algunos acudían como novatos y era la primera vez que se enfrentaban a un examen de oposición. En cambio, otros llegaban con la experiencia previa aprendida y repetían a ver si, esta vez sí, conseguían nota para poder conseguir una de las plazas. Los opositores se repartieron entre el campus Río Ebro, edificios Ada Byron, Betancourt, Normante y Torres Quevedo, y el campus de San Francisco, entre las Facultades de Derecho y Medicina, según orden alfabético. Tras el examen, el Salud colgará en la web las respuestas correctas y los aspirantes tendrán tres días para plantear impugnaciones ante el Tribunal.

El próximo 10 de abril se celebrará el examen de auxiliar administrativo, también para el Salud.

Del mismo modo que ha sucedido con la convocatoria para celador, el número de inscritos ha descendido notablemente respecto a las pruebas que se han convocado años atrás.

La decisión de la mayoría de las comunidades autónomas de unificar la fecha de cada una de las especialidades ha provocado un descenso del efecto llamada y, por lo tanto, una caída en el número de inscritos. Algo que no solo afecta a Aragón, sino que se extiende por el resto del territorio.