Una sala de gimnasio, un monitor y varios usuarios. La actividad es por parejas y la persona con la que te toca estirar o ejecutar el movimiento padece psoriasis. Se suceden las miradas a sus heridas, el recelo a participar, los comentarios... Estas sensaciones las pudieron experimentar ayer, a través de la realidad virtual, todos los usuarios del hospital Miguel de Servet de Zaragoza que quisieron participar en un acto de sensibilización de esta enfermedad de la piel que en Aragón afecta a 30.000 personas.

Gracias a esta iniciativa de Acción Psoriasis, la organización que aglutina a todos los pacientes de España, se consigue simular y «sentir de cerca» la experiencia de un paciente con esta enfermedad en un gimnasio. «Nuestro objetivo es divulgar la patología entre la población en general para que sepa qué es y comprenda cómo es el día a día de una persona con psoriasis. Sufren estigmatización y rechazo por tener la piel diferente. La gente se aparta de ellos y la afección psicológica es muy importante en esta enfermedad», explica Santiago Alfonso, director de Acción Psoriasis

«Ofrecen una tarjeta de presentación marcada que, en un gimnasio, se han dado situaciones donde les han invitado a abandonar la instalación. Convivir con una piel diferente es complicado en la vida cotidiana, en las relaciones laborales o sexuales», matizó Alfonso.

En el acto de realidad virtual participaron, además de usuarios del hospital, varios alumnos del colegio San Vicente de Paúl de Zaragoza. Al salir de la cabina donde se les colocaban las gafas y los cascos lo hicieron impresionados por lo que acababan de ver. «Es una pasada», le decía un joven a otro compañero.

Tratamiento avanzado

La psoriasis se caracteriza por aparecer, mediante escamas o heridas, en codos, rodillas, la zona lumbar, cuero cabelludo, manos o genitales. «Es una enfermedad inflamatoria y genética. No podemos decir que se cura, pero actualmente el tratamiento está muy avanzado. Desde el 2005 hay unos fármacos biológicos que bloquean las inflamaciones y permiten blanquear la psoriasis, es decir, que evitan las lesiones», explica Estrella Simal, facultativo especialista de área del Servet y profesora asociada en la Universidad de Zaragoza.

La psoriasis no viene sola. Generalmente está asociada a otras patologías. «Es lo que se llama comorbilidad y se relaciona con enfermedades como diabetes, hipertensión, cáncer o riesgo cardiovascular», matiza Simal. El perfil del paciente es «variado», aunque a partir de los 20 años se manifiesta más. Así, la forma de prevenir la psoriasis es un hábito de vida saludable.