La imponente presencia de la colegiata de Caspe es el eterno recordatorio de que en este municipio cambió en pocas jornadas la Historia de Aragón. La grandiosa colegiata de Santa María la Mayor del Pilar de Caspe fue la sede del famoso Compromiso en el que el Reino de Aragón intentó poner fin a un conflicto sucesorio que amenazaba con la desaparición de la unidad. En el interior del templo, nueve compromisarios de las distintas facciones que se disputaban el corona, eligieron a un rey para determinar el destino de la corona de Aragón en 1412. Entre los aspirantes, Fernando de Antequera sería coronado como Fernando I de Aragón.
La colegiata formaba parte de una especie de acrópolis mixta en donde había edificaciones religiosas, civiles y defensivas, según explica la guía Arte en la Provincia de Zaragoza editada por la Diputación Provincial (DPZ). Fue fundada por la orden militar de San Juan al borde de un acantilado sobre la huerta del río Guadalope. Este conjunto monumental comprendía la iglesia, el castillo del Baylío
