La capital aragonesa sigue siendo una ciudad atractiva para las bandas organizadas especializadas en el robo de viviendas. Así lo indican los últimos datos recopilados por el Ministerio del Interior que reflejan un aumento de un 12% en Zaragoza, si bien en toda la comunidad este tipo de sustracciones descendieron un 5,7%. Más de la mitad de los responsables de estos hechos delictivos fueron cometidos por organizaciones procedentes de Georgia.

Así lo destacan desde la Jefatura Superior de Policía de Aragón, a partir de las diferentes células itinerantes desarticuladas y del tipo de desvalijamientos cometidos, puesto que el modus operandi que emplean estas personas es muy específico en comparación con delincuentes de otras nacionalidades como los chilenos (que suelen operar en grandes urbanizaciones y hurtan todo tipo de bienes, incluso, electrodomésticos y ropa) o los españoles (que suelen cometer la técnica del escalo y se centran en las joyas).

Los georgianos se centran principalmente en el oro. Son hombres de mediana edad cuya vestimenta pasa desapercibida y que suelen elegir domicilios situados cerca de plazas, parques o zonas en las que poder hacer vigilancia. Esto no significa que no actúen en calles normales. El hecho de tener una zona verde en las inmediaciones lo utilizan para, en muchos casos, tener a una persona vigilando mientras cometen el robo.

MARCADAS / Este tipo de bandas no suelen actuar de forma directa, sino que se dedican a marcar las viviendas para entrar «sin peligro». Utilizan tres sistemas: el bumping, la magic key y la ganzúa de toda la vida. El más utilizado es el primero, que sirve para abrir las cerraduras de llaves de puntos. Utilizan una llave plana que introducen y, tras dar varios golpes, los pistones marcan la clave y consiguen entrar.

Este modus operandi es muy diferente de las bandas de serbocroatas que, según estas mismas fuentes, en Zaragoza no se han detectado este año. Estas se caracterizan por mujeres que visten de marcas de lujo -han cambiado, antes iban vestidas con sayas- y que su objetivo siempre es un domicilio situado en el centro. Aprovechan el horario comercial para pasar desapercibidas, ya que es el momento en el que más viviendas están vacías. El horario de los colegios también lo eligen. Uno de los procedimientos que emplean es el método del resbalón, ya que muchas personas tienen la costumbre de cerrar de un portazo su vivienda porque van a salir de la misma por un breve espacio de tiempo y no dan doble vuelta de llave. Un hecho que para ellas es como si la puerta estuviera abierta.