GRANDEZA. Ni todos los accidentes que se producen en la montaña son por imprudencias, ni la montaña es un peligro por si sola. Es verdad que hay personas imprudentes, que intentan actividades (descensos, escalada...) sin la debida preparación o sin estar acompañados de personas cualificadas; pero la montaña, y ese es uno de los aspectos que siempre han fascinado al ser humano, tiene una grandeza que hace que no siempre la podamos ´dominar´ y que en circunstancias nos supere y pueda ser tan peligrosa como cualquier otro ámbito de la vida humana (velocidad en carretera, trabajo estresante, una fiesta con excesos...). ¡Disfruta de la montaña y aprende de ella! anónimo .

SENTIDO COMUN. No creo que la gente sea especialmente imprudente. Habrá de todo, pero en general creo que todos los que vamos a la montaña lo hacemos con bastante sentido común. Como suele suceder con los esquiadores, que sólo se rompen el hueso los que más dominan y más saben, en la montaña pasa igual, solamente se descalabra quien tiene la suficiente confianza y soltura para atreverse con los pasos más difíciles. Lo que ocurre es que por mucha experiencia que tengas, la montaña siempre te puede pillar desprevenido. Supongo también que el número de accidentes es proporcional al número de visitantes que recibe el Pirineo. Además ahora se practican muchas más actividades en la montaña. casimiro .

MAS PRUDENCIA. Suena aburrido y paternalista, pero ya sea para coger setas o para hacer barranquismo subimos a la montaña muy a lo loco y sin tomar un mínimo de precauciones. La mayoría de accidentes se deben a la imprudencia. Los montañeros más expertos compensan su conocimiento con las actividades que realizan, siempre más arriesgadas y peligrosas. Los demás simplemente deberíamos tener mucho más cuidado, en especial con el equipamiento/ropa con el que subimos a la montaña y estando mucho más atentos a los consejos de los expertos o los guías que nos llevan. Es como los accidentes de coche, parece que siempre le tocan a otros hasta que un día ¡plas! y creo que a pocas excursiones que se hayan hecho, todos nos hemos encontrado con alguna situación, que se salva con unas risas, pero a la que le ha faltado poco para acabar muy mal. anónimo .