"Ningún alumno puede quedarse atrás". La frase de Maru Díaz, consejera de Ciencia, Universidad y Sociedad del Conocimiento, resume el fin del acuerdo alcanzado entre la DGA y la Universidad de Zaragoza para minimizar, lo máximo posible, los efectos que la crisis sanitaria y económica del coronavirus pueda provocar en el alumnado el próximo curso. El convenio, al que se ha llegado "de manera rápida y sin ningún tipo de problema" entre ambas instituciones, contempla, entre otras cosas, que los alumnos que hayan suspendido este año alguna asignatura no tengan que abonar un precio superior el curso siguiente por esa segunda matrícula. Es decir, se considerará que no corre convocatoria y, por tanto, no deberá pagar los créditos como segunda matrícula sino como primera. El coste total de esta medida se estima en torno a 3,1 millones de euros.

En este sentido, Aragón "ha ido un paso más allá", según ha reconocido el rector del campus José Antonio Mayoral, ya que además de la reducción de tasas aprobada por parte del Gobierno de España y que aplicarán todas las universidades, la comunidad ha aplicado estas "medidas extraordinarias" en beneficio de los estudiantes. Otra de las novedades, por ejemplo, es el acuerdo de la exención total del pago para aquellos perceptores del Ingreso Mínimo Vital entre los meses de junio y diciembre.

Respecto a las tasas, en función del próximo decreto de precios públicos, volverán a los precios del curso 2011-2012 (que incrementó posteriormente con el PP) y se contempla una reducción de hasta un 9% en primera matrícula en los grados de más experimentalidad (Biotecnología, Arquitectura o Bellas Artes, por ejemplo) y de hasta un 6,5% en segundas matrículas. Ambas reducciones suponen una inversión aproximada de 1,1 millones de euros, que beneficiará directamente a los 26.459 estudiantes de grado del campus. El ahorro medio para cada estudiante de grado será de 173 euros, un 13% menos que este curso.

Supresión temporal del 50x50

El hecho de no incrementar el precio en segundas matrículas de asignaturas suspendidas hace "que no tenga sentido", según ha dicho Mayoral, el programa de bonificación del 50x50, puesto en marcha en el curso 19-20 y que queda suspendido temporalmente. Este bonifica a los estudiantes de grado de la Universidad de Zaragoza hasta con un 50% del coste de su matrícula, en función de los créditos aprobados en 1ª matrícula el curso anterior. "No tiene sentido porque este programa supone una inversión de 2,5 millones y, por un poco más (3,1 millones) vamos a ofrecer una ayuda adicional y que da más beneficio", ha señalado.

El refuerzo de todas estas ayudas, en cualquier caso, no va en detrimento del resto de becas ya aprobadas anteriormente (movilidades, másteres estratégicos y Eramus), sino que es "un además" al listado de ayudas para el estudiante.

El impacto de esta inversión, obviamente, ha obligado tanto al campus como a la DGA a hacer encaje de bolillos y tener que hacer modificaciones en otros proyectos previstos o retirar partidas ya asignadas. En cualquier caso "no habrá consecuencias importantes", ya que la situación del coronavirus tampoco ha permitido avanzar en obras o proyectos. "Íbamos a llegar a septiembre con un dinero sin gastar porque no ha habido opción y, en ese caso, se ha redirigido a otros proyectos que corrían más prisa o eran necesarios. El presupuesto se ha exprimido al máximo y hubiera sido imperdonable llegar a final de año con un dinero sin gastar tras la situación que vivimos", ha reconocido Díaz.