Alfonso Millera, el médico de Alcañiz acusado de realizar presuntos abusos sexuales a sus pacientes, había sido presidente de Cruz Roja en Aragón durante varios años y, actualmente, era militante del Partido Socialista, de donde ya se ha dado de baja de forma "voluntaria".

Este médico, que hasta ahora ejercía como cirujano en el Hospital Comarcal de Alcañiz, de donde ha sido cautelarmente suspendido de empleo y sueldo, fue durante unos años a finales de la década de los noventa presidente de Cruz Roja Aragón y con anterioridad había ocupado otros cargos en esta institución a nivel provincial.

Además, Alfonso Millera también era militante del Partido Socialista y lo fue hasta ayer, día en que presentó su baja "voluntaria", una solicitud que fue aceptada por la dirección del partido. Sin embargo, según explicaron fuentes del PSOE, "si él no hubiera presentado la baja voluntaria, desde el partido se le hubiera hecho una suspensión cautelar y se hubiera iniciado una investigación interna".

TESTIMONIO Ayer mismo, Alfonso Millera accedió a hablar con este periódico. El mismo fue quien respondió al teléfono con una voz grave y apagada. "Voy a defenderme porque soy completamente inocente", afirmó Millera, quien puntualizó que las acusaciones que pesan sobre él son "injustificadas". Sin embargo, el facultativo también avanzó que, por ahora, no va a precisar nada más por "no conculcar ningún deber profesional".

El caso de este médico saltó a la luz pública el pasado sábado después de que la DGA, tras llevar a cabo una investigación en el hospital de Alcañiz, decidiera suspender cautelarmente de empleo y sueldo al cirujano y traspasar la documentación a la fiscal de dicha localidad turolense para que se hiciera cargo del caso. Contra él, aunque no hay denuncias escritas, sí que se han vertido acusaciones verbales sobre presuntos abusos sexuales a pacientes que finalmente derivaron en una investigación.