Urbanismo iniciará el proceso para permitir que el hotel Meliá de Zaragoza pueda destinar las plantas superiores del edificio a viviendas, de modo que el área destinada a habitaciones quedaría acotada en los tres primeros pisos del inmueble. El reparto final sería de 62 viviendas y 105 habitaciones, frente a las 245 que existen actualmente. La inversión prevista podría rondar los 15 o 20 millones de euros en un proyecto para reestructurar el edificio y reducir el espacio destinado a usos hoteleros.

Actualmente, el Plan General de Ordenación Ubana (PGOU) ya permite que los hoteles situados únicamente en el Casco Histórico dediquen parte de su espacio a viviendas, pero con la condición de que la partición sea solo vertical y no en horizontal, como demandaba el Meliá, ubicado en César Agusto.

Cuando concluya la modificación del plan que ayer se acordó tramitar --con los votos a favor de PSOE, PP y CHA y la abstención de IU-- no solo este hotel podrá segregar los usos por plantas, sino cualquier establecimiento hotelero situado en el casco.

Urbanismo se ha planteado eliminar de sus ordenanza esta limitación tras la solicitud del Meliá para poder reconvertir sus instalaciones y destinar las plantas superiores a viviendas. Este debate se pospuso inicialmente ya que IU solicitó, primero, un estudio para determinar cuántos hoteles situados en el Casco Histórico de la ciudad podrían reconvertirse con el fin de que los inmuebles pueden ofrecer tanto pisos como habitaciones de hotel.