Aragón ha vivido un primer trimestre excepcional y sorprendente en materia de empleo. Los tres primeros meses del año son habitualmente malos en este sentido por cuestiones estacionales, pero este 2019 no ha sido así. De hecho, el mercado laboral aragonés ha registrado su mejor primer trimestre desde el 2007. Según la Encuesta de Población Activa (EPA) publicada ayer, entre enero y marzo la comunidad ha sumado 200 ocupados. Son pocos, pero hay que tener en cuenta que en los últimos once años Aragón nunca había logrado crear empleo durante los tres primeros meses del año. Se desconocen las razones de este buen dato; más teniendo en cuenta que la Semana Santa ha caído en abril. Quizá el retraso de la temporada de esquí demoró algunas de las contrataciones que habitualmente se realizan en noviembre o diciembre, pero tampoco parece una razón nuclear.
Lo cierto es que el buen comienzo de año en Aragón contrasta con lo sucedido en el conjunto del país. España ha perdido en el primer trimestre 93.400 empleos y ha sumado 49.900 parados, el mayor incremento desde el 2013. No en vano, la ocupación solo ha subido en cuatro comunidades: Andalucía, País Vasco, Extremadura y Aragón.
El inicio del año en la comunidad también ha sido aparentemente bueno desde el punto de vista del paro con 4.300 desempleados menos, si bien esta bajada es engañosa porque se debe a la caída de la población activa. Aragón cerró marzo con 4.100 activos menos que en diciembre, un dato muy negativo para los sindicatos. «El paro ha bajado porque han caído los activos», insistió ayer el líder de UGT Aragón, Daniel Alastuey. Las centrales explican este descenso en el efecto desánimo que está generando la mala calidad del empleo, ante lo que muchos optan por irse al extranjero o seguir formándose.
Sea como sea, la última bajada ha dejado la cifra total de parados en 67.800 aragoneses y la tasa de desempleo en el 10,5%, la tercera más baja del país tras Navarra y País Vasco.
A pesar del buen dato puntual del primer trimestre en Aragón, la comparativa anual de los datos sigue demostrando que la recuperación del mercado de trabajo se está ralentizando. En el último año, la comunidad ha ganado 16.100 ocupados dejando la cifra total en 577.200 trabajadores. La subida, del 2,87%, es menor a la del conjunto del país, algo que también sucede con los datos del paro. Aragón solo tiene hoy 5.700 desempleados menos que hace un año, un descenso menor a los registrados años atrás. «La recuperación sigue perdiendo fuerza», alertó Alastuey.
En este mismo sentido se manifestó ayer CEOE Aragón, a la que le preocupa «la progresiva moderación de la creación de empleo, la mayor contracción del trabajo privado y la reducción de la ocupación industrial», tal y como apuntó ayer en una nota de prensa. Con todo, y tras reclamar una reducción de sus costes fiscales, laborales y energéticos, la patronal consideró positivos los datos del primer trimestre.
Por su parte, la consejera de Economía de la DGA, Marta Gastón, trasladó su satisfacción por las cifras y apuntó que la bajda del paro se debe, entre otras cosas, a las políticas activas de empleo desarrolladas por su departamento. Varias acciones que han sido replicadas a nivel nacional.
SE MANTIENE LA TEMPORALIDAD / No obstante, la consejera volvió a destacar su preocupación por la temporalidad. Algo que también denunciaron los sindicatos, que lamentaron que el poco empleo que se crea es «precario y temporal». UGT y CCOO también alertaron de la brecha de género que, no solo se mantiene, sino que «aumenta trimestre tras trimestre». «Del total de parados, 32.300 son hombres y 35.400 mujeres», alertó CCOO, que pidió un incremento salarial para mejorar el consumo interno e impulsar la economía española.
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