Los trenes de mercancías que habitualmente circulan por la Ronda Sur tienen que dividirse hasta en tres convoyes para poder superar las pendientes. Tanto la locomotora diésel Mitsubishi 269, la japonesa, como la eléctrica Siemens 250, la alemana, empleadas en Zaragoza pueden llevar hasta 2.500 toneladas en trazados planos, pero su carga se limita a 830 y 1.310 toneladas, respectivamente, cuando se ven obligadas a superar rampas como las de la circunvalación, del 1,8%.La situación aún se complica más con la meteorología, por increíble que parezca. En el caso de que las vías estén mojadas, los trenes llegan a patinar y no superan la pendiente con la misma carga que, con la vía seca, sí pueden arrastrar. "En numerosas ocasiones hemos tenido que llamar para que nos empujara otra locomotora o hemos tenido que retroceder para deshacernos de algún vagón para continuar así el trayecto", apuntaron.