La esquiadora fallecida se encontraba en Candanchú en compañía de su marido y otra pareja. El esposo manifestó a los medios de comunicación que su mujer esquiaba "muy bien" y que "llevaba casco protector". Casualmente, en el día de ayer había en Candanchú numerosos periodistas y expertos de la Guardia Civil, dado que se celebraba una jornada sobre rescates en montaña.