El hospital General de la Defensa -conocido popularmente como hospital Militar—abre desde mañana doce camas para enfermos psiquiátricos que serán derivados desde el servicio de Urgencias del Miguel Servet. El déficit de camas para este colectivo y la demora en la construcción de la unidad de agudos -acumula varios años de espera-, ha llevado a la Administración sanitaria a rubricar un nuevo acuerdo con la instalación sanitaria militar para destinar a este centro a enfermos psiquiátricos.

El proceso estará marcado por el especialista psiquiatra del Servet, que, tras el paso por urgencias de un enfermo, será el que decida si se deriva o no al hospital Militar. «Los trastornos psiquiátricos se agudizan en primavera y otoño y, de hecho, este incremento en la afluencia ya se está produciendo mucho en Urgencias. El Clínico nos echó una mano hace unas semanas abriendo siete camas de unas habitaciones simples que convirtieron en dobles porque estos pacientes pueden estar solos o acompañados, dependiendo de sus necesidades, pero tras este importante apoyo del Clínico nos planteamos finalmente utilizar camas del Militar», expuso Juan Ramón Portillo, director del Hospital Miguel Servet.

Ampliación

De este modo, a las 18 camas existentes ahora para este colectivo se añadirán otras 12, lo que supondrá disponer de las mismas habitaciones que se destinarán a enfermos psiquiátricos una vez habilitada la unidad de agudos, cuyas obras todavía están pendientes de licitación.

Por eso, la intención es que esta unidad del centro dependiente de Defensa esté abierta mientras duren las obras.

«La unidad geriátrica la abrimos en siete días, pero en la de Psiquiatría ha habido que acondicionar muchas otras cosas, como que las camas no se movieran o que los cristales no se puedan abrir ni romper con facilidad. Eso nos ha costado tres semanas de trabajos de adaptación», indicó el director del Miguel Servet.

Criterios médicos

Al igual que la unidad geriátrica habilitada en febrero también en el Militar, el personal que atenderá a los enfermos psiquiátricos será del Salud. El hospital de la Defensa pone las instalaciones y los equipamientos.

«Se atenderá a criterios médicos. El psiquiatra del Miguel Servet será quien decida si un paciente ingresa o no en el Militar aunque, en principio, no existe un perfil determinado. En teoría, cualquiera podría ser derivado allí, aunque puede ser que un paciente que además tenga otra patología se quede aquí para recibir cuidados especiales», expuso Portillo.

Las obras de la unidad de agudos comenzarán en junio si se cumplen los plazos previstos. Ese es el objetivo, sobre todo, con la intención de no acometer los trabajos en invierno, que es cuando más camas se necesitan.

«Creemos que cuando se inaugure esa unidad ya no serán necesarias las camas del Militar, pero la realidad es tozuda, así que ya veremos», indicó el director del Miguel Servet.