La consejera de Cultura y Educación de Aragón, Mayte Pérez, fue recibida ayer por el ministro de Cultura, José Guirao, quien le ha anunciado que visitará el Monasterio de Sijena y le ha transmitido su apoyo a que el traslado de las pinturas murales sea «con celeridad» una vez que «haya sentencia». En declaraciones a los medios tras la reunión que mantuvieron ayer ambos dirigentes para tratar los diversos asuntos relacionados con la materia y que tienen incidencia en la comunidad autónoma, la consejera aragonesa indicó que Guirao le manifestó que «respeta» el reclamo por el traslado de las pinturas murales y «dice que cuando haya sentencia, que se cumpla con celeridad su ejecución».

«Lo hemos invitado al monasterio, que está siendo objeto de rehabilitación y se ha comprometido a visitarlo, solo falta confirmar la fecha», enfatizó Pérez, en tanto recordó que en aquel complejo ya hay una «sala capitular donde se instalarán las pinturas murales que más pronto que tarde» espera que sean trasladadas.

«El Gobierno propiciará la vuelta de las pinturas. Han pasado dos años desde que se interpuso en la audiencia provincial el recurso por parte del MNAC (Museo Nacional de Arte Catalana) y de la Generalitat. Esperamos que dictamine en forma favorable y creemos que no será de otra forma porque hay argumentos sólidos», añadió.

Consultada sobre si confía en que el traslado sea factible incluso tras una eventual sentencia favorable, la consejera recordó que un grupo del gobierno aragonés debió ir en persona al museo de Lérida a buscar parte de las pinturas reclamadas y ha pedido «velar por el cumplimiento de la legalidad y las sentencias».

REACCIÓN / La reunión mantenida ayer entre el ministro y la consejera es la propia de la primera toma de contacto tras la conformación del nuevo Gobierno central, enmarcada en las relaciones bilaterales propias entre administraciones. Pero esta reunión cobró especial interés tras la visita que realizó el ministro el pasado mes de agosto a Barcelona. Ahí visitó el Museo Nacional de Arte de Cataluña, y sus declaraciones en las que no tomó partido por ninguna decisión respecto a las pinturas de las sala capitular de Sijena que allí se exhiben hasta que haya una sentencia fueron usadas como arma arrojadiza por la oposición en Aragón. Esta consideró que el ministro se lavaba las manos y se interpretó como una concesión a Cataluña, ante la situación política que vive esa comunidad.

Sin embargo, el ministro simplemente repitió lo mismo de ayer: hay que esperar a que haya una sentencia y entonces sí se debe actuar con celeridad en el caso de que esta sea favorable a los intereses de Aragón. De momento, considera que no es necesario el traslado en tanto que no hay una decisión judicial firme. Así ocurrió con otro de los pleitos que mantiene Aragón con Cataluña. En este caso unas piezas depositadas en el Museo de Lérida que fueron recogidas por la policía.