Sólo una de las 22 piscinas municipales de verano de Zaragoza dispone de sistemas de acceso al agua para minusválidos. Este año, con la inauguración de un nuevo centro deportivo adaptado en el barrio rural de San Gregorio, las personas de movilidad reducida han descubierto lo que es disfrutar de un baño al aire libre sin tener que acudir acompañado. Hasta hace un mes, la oferta para estos ciudadanos era nula.
La ley de eliminación de barreras arquitectónicas obliga a los ayuntamientos a adaptar todos los edificios públicos de nueva creación. Es gracias a esta norma por lo que la recién construida piscina de San Gregorio dispone de una rampa para acceder al agua en uno de sus vasos.
La concejalía de Deportes del Ayuntamiento de Zaragoza ha anunciado que para el próximo año se reservará una partida de los presupuestos municipales para adquirir cinco grúas descendedoras. En la actualidad, sólo cuatro piscinas cubiertas cuentan con este sistema de acceso al agua: el centro municipal deportivo Alberto Maestro, el José Garcés (en el barrio de Torrero), el Palafox y el Río Ebro.
"Entendemos que es indispensable eliminar las barreras arquitectónicas de las piscinas públicas. De ahí que en los próximos años se vaya invirtiendo progresivamente en la compra de aparatos que permitan el acceso al agua de estas personas", sostuvo Luis Pastor, concejal de Deportes.
La adaptación de las 21 instalaciones públicas requiere un gran esfuerzo inversor. Según Pastor, existen dos fórmulas para eliminar las barreras arquitectónicas en las piscinas exteriores: la construcción de rampas de acceso en los vasos y la colocación de grúas de descenso. "De entre las dos, la última opción es la más asequible económicamente. Cada aparato cuesta unos 3.600 euros, de ahí que no puedan adquirse todos los que faltan", aclaró Pastor.
LA PROXIMA, VALDEFIERRO Después de las piscinas de San Gregorio, las siguientes instalaciones que se adaptarán serán las de Valdefierro. Actualmente, este centro deportivo se encuentra cerrado debido a la aparición de unas grietas en el fondo del vaso. "Vamos a realizar obra nueva en ese distrito y aún no hemos decidido si se aprovechará para instalar una rampa de acceso o una grúa, pero sí tenemos claro que estará totalmente adaptada", dijo el concejal.
Disminuidos Físicos de Aragón reconoció que la oferta en la capital aragonesa en cuanto a piscinas públicas es "totalmente deficitaria". Fuentes de la asociación indicaron que el motivo del retraso que acumula la eliminación de barreras arquitectónicas en los edificios públicos se debe al "enorme margen" de adaptación que concede la ley. "Se está trabajando, pero aún se tardará muchos años en lograr unos niveles de accesibilidad aceptables", comentaron desde Disminuidos.
