El crimen machista que presuntamente acabó con la vida de una mujer en el municipio cántabro de Escalante, el pasado lunes, tuvo su eco ayer en Aragón con la celebración de un minuto de silencio en el Ayuntamiento de Zaragoza y en las Cortes de Aragón, donde fue investido Javier Lambán como presidente de Aragón.
La denuncia también se trasladó al municipio de La Muela, donde Juan (presunto autor del crimen) y su mujer residieron durante varios años antes de trasladarse a Cantabria. De hecho, la mujer, natural de Mahón, conoció a su marido en esta localidad zaragozana.
El alcalde de Zaragoza, Jorge Azcón, y todos los concejales de los grupos municipales del consistorio hicieron un receso en el pleno que se estaba celebrando ayer para mostrar su condena y rechazo hacia este crimen. Los representantes de Vox en el Ayuntamiento de Zaragoza participaron en el acto y guardaron un minuto de silencio, todo lo contrario a lo que sucedió la semana pasada en Alicante, donde una concejala de Vox de la localidad de San Juan de Alicante se desmarcó del homenaje a otra víctima, y aunque salió a la calle, se mantuvo a unos metros de distancia del resto de concejales.
Azcón expresó su pésame y trasladó las condolencias a los familiares de la mujer de 52 años. «El Ayuntamiento de Zaragoza no va a cejar y no va a dejar de poner todos los medios que están a su alcance para que eliminemos esta lacra de la sociedad actual», expresó Azcón. «Vamos a seguir trabajando en el ayuntamiento para que ninguna mujer tenga que ser víctima de la violencia machista», añadió el alcalde.
Con este caso confirmado por la Delegación del Gobierno para la Violencia de Género, las mujeres muertas a manos de sus parejas o exparejas ascienden a 36 este año y 1.011 desde el 1 de enero del 2003, fecha en la que se inició la contabilidad de mujeres asesinadas por violencia de género.
En Santander también los ediles llevaron su malestar a las puertas del ayuntamiento en un acto que se repitió en toda España con una única consigna: que sea el último, dado que ya son 36 las mujeres asesinadas y un total de 26 los menores que se han quedado húerfanos. La alcaldesa de Santander, Gema Igual, señaló que «esta lacra no la podemos tolerar» e indicó que «ojalá no haya que hacer más minutos de silencio», dijo. También allí un grupo de unas 200 personas se manifestaron contra el crimen.
La mujer asesinada no había presentado denuncias previas por malos tratos, según informó la Delegación del Gobierno en Cantabria. Su marido falleció en un accidente de tráfico tras colisionar con su vehículo contra un árbol.
El matrimonio, que se había conocido en La Muela, tenía dos hijos mayores y habían sido abuelos hace poco. En la localidad zaragozana, donde eran bastante conocidos, regentaron un restaurante y hace dos años decidieron mudarse al barrio San Roque de Escalante, en Santander.
