La restauración hace unos años de El piquete de Quinto trajo consigo una sorpresa que pocos esperaban. Al excavar el suelo para aclimatar el interior aparecieron los cuerpos de medio centenar de momias de los siglos XVIII y XIX en perfecto estado. Según los investigadores el proceso de momificación se produjo de forma natural debido a las condiciones de humedad del recinto. El peculiar hallazgo ha llamado la atención de investigadores y curiosos hasta el punto de que el equipo del programa Cuarto milenio se ha interesado por las misteriosas momias. En la actualidad los cuerpos momificados se conservan en una capilla lateral del templo y no son visitables para evitar la degradación de sus componentes.