Un total de nueve personas han muerto en accidente de montaña en Aragón desde el pasado 1 de junio, todas ellas en la provincia de Huesca, bien en el Pirineo bien en la sierra de Guara. En el mes de junio se registraron cuatro fallecimientos, igual que en julio, mientras que en lo que va de agosto se ha registrado una única víctima mortal, un montañero zaragozano que perdió la vida al sufrir una caída en el ibón de Vallibierna.

Mientras tanto, el número de rescates efectuados este mes de agosto se podría situar en una media algo superior a la que se dio en julio, cuando los equipos de rescate de la Guardia Civil (Greim) atendieron en torno a tres emergencias diarias.

La mayoría de estas intervenciones se realizan en el Pirineo y en Guara, si bien también cabe recordar un rescate realizado en los estrechos del río Ebrón, en la provincia de Teruel.

Con este ritmo, la provincia oscense se ha convertido en la que arroja el mayor número de actuaciones de los expertos en salvamentos de montaña. De hecho, el pasado mes de julio se contabilizaron más de 90 rescates, lo que supuso el 55% de los que se llevaron a cabo en el conjunto de España por parte de la Benemérita.

Esto se explica por la gran afluencia de visitantes que experimenta la cordillera pirenaica durante el periodo estival, en particular durante los meses de julio y agosto. Las situaciones de riesgo no las viven exclusivamente los escaladores. Afectan asimismo a los senderistas y a los aficionados al descenso de barrancos. Unas veces es el tiempo cambiante e imprevisible el que sorprende a los montañeros, pero otras cometen imprudencias que les llevan a extraviarse, al agotamiento o a una caída.