Un montañero madrileño de 49 años, identificado con las iniciales J. M. S., falleció anteayer por la tarde en el pico Balaitus, al sufrir una caída vertical de unos 200 metros en un cortado de nieve. La Guardia Civil rescató el cuerpo y auxilió a su acompañante, otro madrileño de 47 años, que resultó ileso.

Según informó el instituto armado, el primer aviso del incidente lo recibieron en torno a las 16.45 horas de anteayer, al Equipo de Rescate de Intervención en Montaña (EREIM) de Panticosa, proveniente de la zona del refugio de Respomuso. En él, el compañero del fallecido avisaba de que su amigo había sufrido una caída se había precipitado cuando descendían del pico Balaitus por la Gran Diagonal y que no conseguía verlo ni escucharlo. También explicaba que él se encontraba a unos 2.900 metros de altitud y con grandes dificultades también por lo que solicitaba ayuda.

Cuatro integrantes del EREIM de Panticosa, junto al médico del 061, se desplazaron hacia la zona en el helicóptero con base en Huesca, pero debido a las malas condiciones, con fuertes rachas de viento y nubes que impedían la visibilidad, la aeronave dejó a los especialistas a unos 2.400 metros de altura para que continuaran a pie, mientras iban a por más personal ante la necesidad de llevar a cabo el rescate a pie.

Una vez transportado el segundo grupo de especialistas de montaña, el helicóptero, aprovechando una ventana abierta en las nubes y a pesar de las fuertes rachas de viento, sobrevoló la zona y al no observar indicios de ninguna persona, decidieron pasar a la otra vertiente, a la cara norte del Balaitus, donde divisaron desde el aire a uno de los montañeros.

Así pues, volvieron a por los especialistas y estos, tras acceder a la nueva zona y vieron el cadáver, que estaba en el lado francés del macizo pirenaico. Por ello hicieron gestiones con la Gendarmería a través de la comisaría conjunta de Canfranc, y los franceses, cuyo helicóptero no podía volar por las nubes, dieron autorización para que la Guardia Civil rescatase el cuerpo.

Paralelamente, un especialista del instituto armado fue llevado en helicópero hasta donde estaba el otro montañero ileso, en una arista muy complicada para el rescate, también por el viento. Finalmente lograron evacuarle con un apoyo parcial de la aeronave y en torno a las 20.00 horas aterrizaban en el helipuerto de Panticosa.

Hora y media después, tras recibir la autorización francesa, el cadáver del fallecido era trasladado a la misma localización, para su traslado al depósito de cadáveres de Jaca en espera de la realización de la autopsia.

Es el segundo fallecido en el Pirineo aragonés en lo que va de junio, después de que hace dos semanas perdiese la vida otro montañero de 49 años, vizcaíno, en el pico Collarada.