El plan de vigilancia del mosquito tigre contempla este año ampliar a 23 municipios aragoneses la instalación de trampas, lo que supone dos puntos más para la toma de muestras en una campaña en la que también se cambia algún emplazamiento de los escogidos en 2016.

Según ha informado el Gobierno de Aragón, este año se instalarán ovitrampas en el Monasterio de Piedra, Caspe, Mequinenza, La Joyosa, Alfajarín, El Burgo de Ebro, Calatayud, Cuarte de Huerva, Utebo, Nuez de Ebro y Pinseque, en la provincia de Zaragoza; en Fraga, Barbastro, Huesca capital, Monzón, Binaced y Alquézar, y en la de Huesca, y en Alcañiz, Calaceite, Teruel capital, Albarracín, Beceite y Mora de Rubielos, en la de Teruel.

El Departamento de Sanidad, a través de la Dirección General de Salud Pública y en colaboración con la Facultad de Veterinaria de la Universidad de Zaragoza, continúa trabajando este año en el plan de preparación y respuesta frente a enfermedades transmitidas por vectores que se inició el pasado año.

Determinados insectos pueden actuar como vectores de enfermedades producidas por virus como los del Dengue, Chikungunya y Zika, y uno de ellos es el "Aedes albopictus", comúnmente conocido como mosquito tigre, cuya presencia en España está documentada desde 2004 y en Aragón, desde 2015, cuando se detectó en Huesca capital y en Monzón.

Las ovitrampas son útiles para seguimientos semanales y a largo plazo y también para detectar colonizaciones nuevas.

Son cubiletes de plástico oscuro, de entre 200 y 1.500 mililitros, llenos de agua hasta cierto nivel, con un listón de madera o tablex semisumergido en su interior donde las hembras acuden a poner sus huevos.

Una vez ubicadas, en la Facultad de Veterinaria se analizan estas tablillas para observar y analizar la posible presencia de huevos y su desarrollo.

Durante la campaña del pasado año, el mosquito tigre fue detectado en 9 municipios aragoneses: Calaceite y Alcañiz, en la provincia de Teruel; Barbastro, Monzón y Fraga, en la provincia de Huesca; y La Joyosa, Alfajarín, Mequinenza y Caspe, en la de Zaragoza.

Este año se han implementado medidas complementarias en Monzón, como la difusión de recomendaciones en todos los canales informativos disponibles o el tratamiento de los sumideros y registros de todo el municipio para evitar la reproducción del mosquito tigre a iniciativa del Ayuntamiento de Monzón.

También se han colocado trampas con larvicidas que impidan el progreso y aparición de mosquitos.

Asimismo, Salud Pública ha solicitado la colaboración de los agentes sociales del municipio para que traten de evitar elementos de retención de agua en espacios públicos y privados.

El plan se complementa con el esfuerzo informativo que se realiza en los Centros de Vacunación Internacional para quienes van a viajar a zonas de riesgo, recomendando a las embarazadas no viajar y medidas de protección contra los mosquitos en el resto de la población.

Asimismo, se seguirán distribuyen los materiales divulgativos para informar a la población sobre medidas de prevención que contribuyen a evitar la proliferación de este vector.

La detección de casos de Zika, no obstante, se ha estancado desde hace unos meses y, desde el inicio de la epidemia en enero de 2016, Aragón ha acumulado un total de 20 afectados, solo uno detectado este año, mientras que se han notificado 18 casos de Chikungunya desde 2014.