El pueblo de Valtorres, en el Campo de Daroca, se ha movilizado para tratar de evitar que se instale a 600 metros de distancia del casco urbano una granja con capacidad para 72.000 pollos.

La instalación aviaria se construiría dentro del término municipal de Terrer, que dista cinco kilómetros, y a solo un kilómetro del núcleo de La Vilueña.

Los vecinos de ambas localidades denuncian que la granja despedirá un olor pestilente y generará grandes cantidades de estiércol en una zona donde existen cultivos frutícolas como cerezos y melocotoneros.

Además, los habitantes de la zona están seguros de que, con el tiempo, los residuos de la granja aviaria acabarán filtrándose en el terreno y contaminando las aguas subterráneas, con el consiguiente daño a la naturaleza y al suministro de agua.

El anuncio de la instalación de la granja industrial ha causado una gran inquietud y los vecinos de los pueblos afectados han mantenido reuniones para mostrar su disconformidad con un proyecto que no aportará riqueza al territorio y que contribuirá a degradar el medio ambiente y la calidad de vida de los residentes.