La movilización planea sobre el sector de los detallistas de alimentación de Zaragoza, que solo en la provincia cuenta con 7.000 trabajadores (la mayoría mujeres). La negociación del convenio colectivo lleva un año bloqueada y por el momento no hay visos de que se vaya a desatascar. Por eso, los sindicatos UGT, CCOO y OSTA no descartan ayer plantear movilizaciones si la patronal no acepta incrementar los salarios en línea con los aumentos de referencia en Aragón.

«Estos trabajadores llevan sin convenio y con los sueldos congelados desde el 2014», denunció ayer en rueda de prensa el secretario de Acción Sindical y Comunicación de la Federación de Servicios de UGT Aragón, Esteban Lauroba, que indicó que este convenio afecta a empresas como Frutos Secos el Rincón, Martín Martín, las franquicias de Bonárea, Coaliment o Alcampo.

La congelación salarial afecta con más intensidad a un sector en el que sus dos categorías más bajas están por debajo del Salario Mínimo Interprofesional. «Con jornada completa perciben unos 13.000 euros brutos al año, mientras que el sueldo de un aprendiz es de 704 euros al mes», indicó la responsable de negociación colectiva de la federación de Servicios de CCOO, Carmen Ramos.

No obstante, los sindicatos recordaron que gran parte de las trabajadoras de estas empresas (el 90% son mujeres) tienen contratos a jornada parcial, por lo que los sueldos son más bajos.

Tras años sin convenio, recordó Lauroba, la Federación de Empresarios de Comercio y Servicios de Zaragoza y Provincia (Ecos) decidió sentarse a negociar el año pasado pero la negociación está «seriamente comprometida» y las trabajadoras, «cansadas» de que los beneficios empresariales no repercutan en sus salarios.

PRÓXIMA REUNIÓN

Ante esta situación, subrayó que esperan una actualización con pagas compensatorias para paliar la pérdida de poder adquisitivo y el convenio se sitúe en salarios en línea con los incrementos de referencia en Aragón. No obstante, las partes se sentarán de nuevo el próximo día 24, y la víspera está prevista una asamblea con los trabajadores en el centro Arsenio Jimeno.

«Conscientes de las dificultades para llegar a un acuerdo, planteamos solo la actualización salarial y de determinados aspectos sociales, dejando para más adelante temas como la formación o la igualdad», dijo Ramos.