Las brigadas municipales han devuelto al Paseo de Sagasta a la muchacha que duerme "La siesta" tras la limpieza a la que ha sido sometida para devolver su esplendor original a esta escultura, donada a la ciudad por el artista turolense Enrique Galcerá en 1964.

Con esta pieza, realizada en piedra caliza y que representa a una muchacha acurrucada en el suelo, con la cabeza tocada con un pañuelo descansando sobre un haz de mieses, Galcerá ganó la Medalla de Plata en la II Bienal de Pintura y Escultura de Zaragoza en 1963.

La obra permaneció en el Paseo de la Constitución hasta 1989, fecha en la que se trasladó a su actual ubicación en el Paseo de Sagasta, como ha recordado la vicealcaldesa, Sara Fernández, con motivo de su restitución tras el proceso de restauración.

Los trabajos, realizados por la Unidad de Patrimonio Cultural han consistido en una limpieza superficial, la retirada de morteros añadidos y líquenes, el relleno de grietas y fisuras y el soldado a la base.

Fernández ha destacado el "gran trabajo" de los técnicos de dicha unidad así como de las brigadas municipales, que han realizado un pedestal para alejar la escultura de la humedad del suelo, según los audios facilitados a Efe por el Consistorio.

De las más de 5.500 obras de arte que tiene catalogadas el Ayuntamiento, alrededor de 250 está repartidas por la ciudad y requieren una labor de mantenimiento tanto por el paso del tiempo como por pintadas y grafitis.

Para ello, Fernández ha recordado que en 2017 el Ayuntamiento firmó un acuerdo con el Gobierno de Aragón para recibir asesoramiento en esos procesos de rehabilitación de obras de arte.