Un vecino de Zaragoza de unos 60 años falleció ayer tras una caída que sufrió mientras descendía la pista Rabosa de la estación de esquí oscense de Cerler.

Según informó Aramón, que dio sus condolencias a la familia, el incidente tuvo lugar en torno al mediodía, cuando los píster (el personal de pistas de la estación) recibieron aviso del siniestro y llegaron al lugar. Ante la gravedad de las heridas, decidieron dar aviso al 112.

El servicio de emergencias movilizó el helicóptero, indicaron fuentes del Gobierno de Aragón, pero el hombre, del que al cierre de esta edición no habían trascendido más datos, falleció en la pista sin que se pudiera hacer nada por reanimarle, por lo que la aeronave volvió a la base.

Aramón no pudo proporcionar ningún detalle de cómo se produjo la caída por estar bajo investigación de la Guardia Civil -del Greim de Benasque, concretamente-, y el instituto armado indicó que, al no tratarse de un rescate ni un accidente que hubiesen atendido, tampoco podían dar detalles de la investigación.

El zaragozano es el segundo esquiador fallecido este año en Aragón, después del joven monitor de 23 años, vecino de Tramacastilla de Tena, que falleció cuando practicaba fuera de pistas en Formigal, en febrero, al sorprenderle un alud.