La Sección Quinta de la Audiencia Provincial de Zaragoza ha confirmado que una mujer debe recibir de los descendientes de su madrastra 17.735,79 euros que correspondían a la herencia de su padre. Los magistrados de esta sala han condenado a los dos sobrinos, únicos herederos de la mujer de su padre, a devolver una parte del dinero que habían dispuesto a su favor al fallecer su tía. Los juzgadores han desestimado el recurso presentado por uno de ellos al señalar que no hay ninguna prueba de que la hija hubiera recibido ya su parte correspondiente de dinero por donaciones.

El mismo día del fallecimiento de su tía, los dos sobrinos extrajeron 21.500 euros de una cuenta bancaria que había pertenecido al matrimonio. El tribunal provincial, como ya hizo en su día la sentencia del Juzgado de Primera Instancia número 12 de Zaragoza que ahora se ve confirmada, ha estimado que pertenecen a la hija los 17.735.79 euros que ésta reclamaba por pertenecer a la herencia de su progenitor.

Por otro lado, este mismo tribunal ha decidido que un comerciante tendrá que desocupar el local y la vivienda anexa al negocio en el que venía trabajando y viviendo desde hace 37 años al haberse jubilado. Consideran que la jubilación hace que el contrato de arrendamiento se extinga.