Investigadoras y emprendedoras reclamaron ayer en el marco de la Jornada del Día Internacional de la Mujer Rural, celebrada en Barbastro, una política de desarrollo rural que tenga en cuenta de forma clara el papel y las capacidades de la mujer. Así se puso de manifiesto durante la lectura de las conclusiones de un encuentro que combinó el debate y las intervenciones de profesoras, empresarias y representantes de todos los grupos de acción local de Aragón, con la reivindicación del papel de la mujer como dinamizadoras de la economía en las zonas rurales.
El documento de conclusiones reclamó una política de desarrollo rural integrada que se centre en la mujer, en su necesidad de formación y en su capacidad empresarial como garantía para el mantenimiento de los pueblos. Además, los reunidos solicitaron que estas ideas se divulguen con el fin de ayudar al medio rural a hacer frente a nuevos desafíos como el cambio climático, la seguridad alimentaria, las nuevas relaciones campo-ciudad y el cumplimiento de los objetivos del programa Estrategia 2020.
Este proyecto incide en la necesidad de "concienciar" a las distintas administraciones autonómicas, nacionales y europeas del papel "imprescindible" que el medio rural desempeña en el equilibrio territorial, no solo como lugar para el ocio sino como reserva agroalimentaria.
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También se instó a tomar medidas para destacar la importancia de las mujeres en las actividades económicas y sociales de las comunidades rurales, así como para impulsar su participación en la vida política local. El documento planteó "corregir" las desigualdades y la discriminación entre sexos a fin de ayudar a las mujeres rurales a adquirir conocimientos, a acceder al mercado laboral y a mejorar sus condiciones de vida.
El informe reclama también "luchar" contra la falsa idea que distingue entre empleos para el hombre y la mujer en el medio rural y "localizar" los obstáculos que dificultan la participación de las mujeres en la vida económica y política de sus comunidades. Reivindicó asimismo la necesidad de estimular el asociacionismo productivo y la creación de redes de colaboración, e implantar de forma generalizada el acceso a la tecnología en las zonas rurales.
Los datos mostrados durante la jornada revelan que, a pesar de que el medio rural abarca el 90% del territorio español, solo acoge al 20% de la población; que las mujeres suponen el 22% y que la falta de oportunidades ha impulsado a muchas a la emigración, lo que ha creado un problema demográfico.
