Los ayuntamientos aragoneses volverán a tener la responsabilidad de tramitar proyectos de desarrollo y de infraestructuras en las estaciones de esquí ya existentes, mientras que el carácter de supramunicipalidad quedará determinado únicamente para posibles nuevos centros invernales. De esta forma, los municipios recuperarán unas competencias de gestión que le fueron arrebatadas por la Ley de Turismo hace un año.

El pleno de las Cortes de Aragón aprobó ayer, con la abstención de PP y CHA, un proyecto de ley del Gobierno autónomo que pretendía corregir disfunciones detectadas al establecer la citada Ley de Turismo que las actuaciones que se llevaran a cabo en las estaciones de esquí tenían carácter supramunicipal, es decir, que trascendían las competencias de los ayuntamientos.

Pero esa determinación ha provocado problemas administrativos, porque no estaba claro qué cuestiones quedaban bajo la calificación de supramunicipal. Además, según la versión del Gobierno aragonés, un centro de esquí que quisiera realizar una obra menor (como un pequeño remonte) sufría un atasco burocrático derivado de la condición de supramunicipalidad.

Con la ley aprobada, defendida por el consejero de Obras Públicas, Javier Velasco, será supramunicipal un proyecto referido a una nueva estación de esquí, mientras que las actuaciones en estaciones ya consolidadas dependerán de los municipios afectados, como sucedía antes de la Ley de Turismo.

Frente a la defensa que hizo Velasco de este proyecto, el diputado de CHA Bizén Fuster señaló que una de las cuestiones por las que lo ha llevado a cabo el PSOE-PAR es porque ha cambiado el color político de los ayuntamientos que ponían pegas a determinadas obras en estaciones de esquí. Y por esa razón la DGA les ha devuelto competencias.

El consejero, sin embargo, redujo la polémica a una cuestión de trámite: "Había inseguridad jurídica", dijo.

Chunta se abstuvo porque si bien cree necesario que se regule el tema de la supramunicipalidad, no debe hacerse con una ley de régimen transitorio como la que el PSOE-PAR llevó a la Cámara. La abstención del PP se debió a que el partido comparte el fondo de la iniciativa, pero considera que se ha sido muy poco ambicioso. "Es mejor esta regulación que la anterior, pero se queda corta. Nos hubiera gustado poder presentar enmiendas", afirmó el popular Juan Antonio Bruned.