El frío ha tardado en llegar pero finalmente ha irrumpido como si fuera pleno invierno. Las temperaturas han caído entre 8 y 10 grados en toda la comunidad aragonesa y la nieve, que hasta ahora había hecho acto de presencia de manera débil, cubrió ayer todo el Pirineo con un manto que en cotas superiores a los 2.000 metros de altitud alcanzó los 40 centímetros de espesor.

Unas nevadas que se repitieron anoche en las zonas altas de las montañas, incluidas las de la Ibérica, y que para algunos constituyen un presagio de lo que puede ser una buena temporada de esquí.

El paso de un frente de borrascas, ya anunciado por los meteorólogos, barrió todo Aragón, aunque con desigual repercusión. En el Pirineo oriental, en Cerler, se recogieron 35 litros por metro cuadrado de precipitación, la mayor parte en forma sólida, mientras que por capitales de provincia, Huesca registró 13 litros, y Zaragoza y Teruel, 7.

Aunque otoñales, estas nieves ya provocaron la salida de máquinas para limpiar las carreteras de montaña y en la A-139, que conduce a Llanos del Hospital, fue necesario el uso de cadenas para circular por ella.

TERMÓMETROS MÁS BAJOS

Los espesores variaron entre los 10 y los 40 centímetros de las cotas altas (más de 2.000 metros), pero hoy podrían ser mayores dado que anoche, las precipitaciones siguieron siendo de nieve en las zonas del Pirineo y el Prepirineo.

Para hoy, la Agencia de Meteorología prevé temperaturas igualmente bajas, con madrugadas más frescas, y máximas sin grandes cambios respecto a ayer. El cierzo seguirá soplando moderado, con rachas localmente fuertes.

En el tercio norte de la comunidad el cielo estará muy nuboso o cubierto con precipitaciones débiles a moderadas, más frecuentes e intensas en la divisoria fronteriza, y ocasionalmente acompañadas de tormentas.

El resto permanecerá nuboso o muy nuboso, sin descartar algunas precipitaciones débiles en la Ibérica y en el extremo oriental de la comunidad.

Por capitales de provincia, las temperaturas oscilarán entre los 3 grados de mínima de Teruel y los 15 grados de máxima de Zaragoza.