Un niño de 8 años resultó herido de gravedad y otros tres pequeños y dos adultos sufrieron lesiones leves en la tarde de ayer en Zaragoza, cuando el tren turístico que une el Actur con los galachos de Juslibol chocó contra el bordillo de una rotonda situada a la entrada del barrio. El vehículo, conocido con el nombre de tren del carrizal , transportaba a 46 personas, entre madres y niños de 6 a 11 años, que celebraban una fiesta de cumpleaños.

El conductor, Serapio A. M., de 43 años y nacionalidad guineana, fue detenido tras dar positivo en la prueba de control de la alcoholemia.

El accidente se produjo sobre las 17.50 horas, cuando el tren enfilaba una cuesta a la entrada de Juslibol, en dirección al área natural de los galachos. Uno de los tres vagones del tren golpeó el bordillo de la rotonda y varios de los pasajeros salieron despedidos. Uno de ellos, el niño Jonay P. O., cayó al suelo y una rueda del vehículo le pasó por encima.

El menor sufrió fractura de pelvis, aunque otras fuentes indicaron que el golpe se había producido en la cadera o en una pierna. La víctima fue trasladada al hospital Infantil, donde quedó ingresada.

El resto de los heridos recibieron el alta médica tras ser atendidos por los equipos sanitarios desplazados al lugar del siniestro.

Al parecer, el tren, cuya locomotora es un tractor agrícola, circulaba a una velocidad "superior a la aconsejable y a la que es normal", según un testigo presencial. "El tren no ha llegado a volcar --añadió--, pero el impacto contra el bordillo ha hecho que los vagones se tambalearan".

Fuentes del Ayuntamiento de Zaragoza informaron de que el tren del carrizal tenía todos sus papeles en regla y de que había pasado sin problemas la Inspección Técnica de Vehículos. Una empresa privada explota en régimen de contrata el trenecito turístico, que es de titularidad municipal.