Responsables de las principales instituciones de Huesca se han concentrado hoy para guardar un minuto de silencio en repulsa por el asesinato, a causa de una brutal paliza, de una niña de 8 años en la localidad altoaragonesa de Sabiñánigo.

A la convocatoria, que ha presidido la subdelegada del Gobierno en Huesca, Mayte Lacruz, han asistido, entre otros, el alcalde de la ciudad, Luis Felipe, el delegado del Ejecutivo aragonés en la provincia, José Luis Abad, así como representantes de otras instituciones altoaragonesas.

Lacruz ha expresado su solidaridad y pésame con la familia de la menor, así como con sus amigos, compañeros de clase y, ha añadido, "a todo Sabiñánigo en general".

Tras recordar que el caso permanece bajo secreto sumarial, ha destacado que "espero y deseo que todo el peso más absoluto de la ley recaiga en el responsable", el tío de la niña, en prisión provisional desde la noche del pasado sábado.

En respuesta a preguntas de los medios de comunicación, la representante institucional ha señalado que no existían "denuncias previas" que hicieran presagiar el crimen, y ha destacado que el suceso "ha cogido por sorpresa en general".

A su juicio, en este caso "no ha fallado nada, en todo caso ha fallado la persona que ha asesinado a la niña, que espero que esté largo tiempo donde tiene que estar, para evitar que vuelva a suceder con otras personas".